España exporta por primera vez armas a Ucrania por casi 210 millones
Arabia Saudí, con 302,2 millones, encabeza la lista de clientes de la industria militar española en el primer semestre de este año
La Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (JIMDDU), el organismo oficial encargado de autorizar las exportaciones de armas españolas, aprobó 12 licencias de venta de material militar a Ucrania por valor 209,7 millones de euros en el primer semestre de este año, según el informe remitido por la Secretaría de Estado de Comercio al Congreso.
El Gobierno de Kiev, al que España no vendió ni un euro de armam...
La Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (JIMDDU), el organismo oficial encargado de autorizar las exportaciones de armas españolas, aprobó 12 licencias de venta de material militar a Ucrania por valor 209,7 millones de euros en el primer semestre de este año, según el informe remitido por la Secretaría de Estado de Comercio al Congreso.
El Gobierno de Kiev, al que España no vendió ni un euro de armamento en 2021, se ha convertido en uno de los principales destinos de la munición española desde que se inició la invasión rusa, el pasado 24 de febrero: el 56% del total de exportaciones autorizadas a Ucrania (118,3 millones) corresponden a proyectiles de artillería de 155 milímetros. Dados los laboriosos trámites que requieren este tipo de operaciones, solo una pequeña parte de lo autorizado (18,2 millones) se materializó antes del 1 de julio y el resto quedó pendiente. Entre los productos exportados a dicho país figuran bombas (7,2 millones), armas de hasta 20 milímetros (6,4) y cascos y blindajes (3,7).
Así figura en el informe Exportaciones Españolas de Material de Defensa, de Otro Material y de Productos y Tecnologías de Doble Uso en el Primer Semestre de 2022. El documento no especifica qué parte de los 209,7 millones corresponde a operaciones comerciales de empresas españolas de munición y cuál a material militar donado por las Fuerzas Armadas españolas en los sucesivos envíos desde que estalló la guerra.
Según los datos de Comercio, las exportaciones españolas de armamento ascendieron a 1.293,1 millones entre enero y junio de 2022, lo que supone una reducción del 20,1% respecto al mismo periodo del año pasado, aunque fuentes del sector reconocen que esta tendencia se ha invertido en los últimos meses. Lo efectivamente exportado solo representó el 30,8% de lo autorizado por el Gobierno.
El 52% de las ventas tuvieron como destino países de la Unión Europea y/o la OTAN (660,9 millones) pero el primer cliente de la industria militar española fue Arabia Saudí, con 302,2 millones, seguida de Francia (187,3), Reino Unido (167,5) y Turquía 126,7).
Las ventas a Riad incluyen la primera de las cinco corbetas encargadas al astillero público Navantia en 2018 por 1.800 millones: el importe de este buque asciende a 261,5 millones. A ello hay que sumar 33,8 millones en munición (26 en proyectiles de 155 milímetros) y 3,8 en material aeronáutico, además de otras partidas menores. El reino saudí encabeza también la lista de clientes de las operaciones autorizadas, con licencias por valor de 994,6 millones, de los que 793,8 corresponden a buques y 195,8 a aeronaves.
Entre las operaciones más importantes realizadas en el primer semestre de este año figuran la venta de un avión de transporte al Ejército de Malí —donde un general español está al mando de la misión de asesoramiento de la UE—, por 29,4 millones; un sistema de control remoto de armas para Emiratos Árabes Unidos por 10,2 millones; o partes de un sistema integrado de guerra electrónica para Pakistán (10,9 millones); así como entregas del avión de transporte Airbus 400M, que se monta en Sevilla, a Francia (147,5 millones) o Turquía (120). Pendiente de ejecutar está la entrega de 12 aviones de búsqueda y rescate para Canadá por 527,6 millones; y de drones para Marruecos por 30.
Entre enero y junio no se produjeron exportaciones de material policial, pero sí se autorizaron operaciones con Perú, sumido en una grave crisis tras el autogolpe del expresidente Castillo a principios de este mes (por valor de 6,3 millones), Bangladesh (por 192.058 euros) y Marruecos (por 78.500). Las ventas de armas de caza y deportivas alcanzaron los 60,1 millones (un 33,2% de aumento). El 65,2% del total (39,2 millones) se vendió a Estados Unidos.
La JIMDDU denegó la licencia para exportar a Pakistán 670 pistolas deportivas por 175,1 millones, por riesgo de desvío; así como la venta a Burkina Fasso de 5,5 millones de cartuchos de caza por valor de 1,6 millones; otros 13,3 millones de cartuchos de caza para Guinea Bissau por 2,7 millones; 50.000 cartuchos lacrimógenos para la República Centroafricana por 2,1 millones; y 2.500 cartuchos lacrimógenos y 40 artificios de luz, sonido y lacrimógenos para el Ministerio del Interior cubano por 350.000 euros. En estos dos últimos casos el motivo esgrimido fue la falta de respeto a los derechos humanos.
Las exportaciones de productos de doble uso (civil y militar) sumaron 155,9 millones (un 5,2% menos que en el primer semestre de 2021); destacando como clientes Noruega (36,3 millones) y Singapur (26,9 millones). Se vetó la exportación a China de ocho cámaras de infrarrojos y un sistema de control de potencia (60.000 euros); aunque el mayor número de denegaciones afectó a Rusia, desde una refinería a repuestos de un buque rompehielos o equipos para su reexportación a una planta nuclear en la India, por un valor total de 2,3 millones. También se ha denegado la licencia para exportar sistemas de drones con destino a Israel (700.000 euros) y Emiratos Árabes Unidos (125.000 euros) por haber sido ya rechazada por otros países europeos.
A Rusia no solo se le denegaron nuevas operaciones, sino que se revocaron licencias ya concedidas para el sector aeroespacial y la industria por valor de 5,8 millones, debido a las sanciones impuestas por la UE tras la invasión de Ucrania.