El PSOE bloquea la propuesta de Unidas Podemos para crear una empresa pública hidroeléctrica
Los socios del Gobierno también se dividen ante una propuesta de Junts sobre el Tribunal de Cuentas
La crisis del PP lo tapa todo, incluso las diferencias entre los socios del Gobierno, que han vivido este martes una jornada de desencuentros en el Congreso. El más relevante, el bloqueo de los socialistas a una propuesta de Unidas Podemos para crear una empresa pública hidroeléctrica, propuesta a la que en principio el mayor de los partidos del Ejecutivo no se había opuesto frontalmente. Y ha habido más: el socio minoritario ha apoyado una propuesta de Junts, ...
La crisis del PP lo tapa todo, incluso las diferencias entre los socios del Gobierno, que han vivido este martes una jornada de desencuentros en el Congreso. El más relevante, el bloqueo de los socialistas a una propuesta de Unidas Podemos para crear una empresa pública hidroeléctrica, propuesta a la que en principio el mayor de los partidos del Ejecutivo no se había opuesto frontalmente. Y ha habido más: el socio minoritario ha apoyado una propuesta de Junts, rechazada por el PSOE, para que las resoluciones del Tribunal de Cuentas sean recurribles ante la justicia ordinaria, y las dos formaciones del Ejecutivo han vuelto a mostrar sus discrepancias sobre quién debe investigar los abusos sexuales a menores en el ámbito de la Iglesia.
La conversación política en agosto pasado estaba monopolizada por la subida sin control de los precios de la luz. El asunto levantó chispas entre los socios del Gobierno por la presión de Unidas Podemos al PSOE para que tomase medidas más decididas contra las grandes eléctricas. Una de las propuestas que la formación izquierdista puso encima de la mesa fue la creación de una empresa pública que gestionaría las concesiones hidroeléctricas públicas a medida que estas vayan caducando. La idea no tuvo mala acogida entre los socialistas y la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, se declaró dispuesta a estudiarla.
Seis meses después, Unidas Podemos (UP) ha llevado al Congreso una proposición de ley con este objetivo y el PSOE la ha bloqueado. Pablo Echenique, el portavoz de UP, había rogado a sus socios que al menos no impidiesen que la iniciativa fuese tramitada con el compromiso de buscar luego una fórmula negociada con las diferentes fuerzas políticas. Los socialistas lo han rehusado. Germán Renau, diputado del PSOE, ha defendido que para poner coto a los precios de la energía eléctrica no es necesario crear una empresa pública, sino cambiar el “marco normativo”. “Ustedes dicen que esta iniciativa permitiría que baje la luz, que desaparezca la pobreza energética o que seamos más verdes, pero no explican por qué”, ha replicado Renau.
Echenique había comenzado con toda la artillería, tachando a las grandes eléctricas de “oligopolio mafioso”. “Sé que suena duro, pero es preciso”, ha remachado. El portavoz de UP ha defendido que una empresa que atienda primero al interés público y no al beneficio mercantil contribuiría a abaratar la energía. En sus apelaciones a los socialistas, ha insistido en el argumento de que, frente al auge de la ultraderecha, el Gobierno debería hacer una política más decididamente de izquierdas. Mientras el PSOE rechaza propuestas como esta, ha concluido Echenique, “algunos se están probando ante el espejo el gorro de bisonte”, en alusión a los asaltantes del Capitolio de Washington.
En apoyo de la iniciativa de UP se ha congregado todo el espectro más a la izquierda de la Cámara: ERC, EH Bildu, Más País-Compromís, CUP y BNG. Todos los demás la han rechazado, el PNV incluido. PP y Vox han coincidido en un augurio: “Sería un nuevo chiringuito para colocar a los suyos”.
La otra iniciativa legislativa que había llegado este martes al pleno también ha suscitado la divergencia entre los socios del Gobierno. UP ha apoyado junto a los nacionalistas una propuesta de Junts, considerada inconstitucional por los socialistas, para que las resoluciones del Tribunal de Cuentas sean recurribles ante la justicia ordinaria. Jaume Asens, de UP, ha justificado su apoyo con duras críticas, compartidas con los nacionalistas, a lo que entiende como imparcialidad de ese tribunal. El diputado catalán ha dedicado buena parte de su discurso a denunciar la corrupción, con menciones a los negocios del hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Asens ha considerado una “mala noticia” la caída de Pablo Casado por “investigar, aunque tarde, la corrupción”.