Dolores Delgado pone a Javier Zaragoza al frente de la lucha contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar
El histórico fiscal antidroga coordinará las investigaciones en Algeciras y su entorno
El fiscal Javier Zaragoza vuelve a la primera línea de la lucha contra el narcotráfico. La fiscal general Dolores Delgado le ha designado como fiscal delegado para coordinar y reforzar las investigaciones contra el narcotráfico y el blanqueo en el entorno del Campo de Gibraltar. Zaragoza, según ha explicado este jueves la Fiscalía...
El fiscal Javier Zaragoza vuelve a la primera línea de la lucha contra el narcotráfico. La fiscal general Dolores Delgado le ha designado como fiscal delegado para coordinar y reforzar las investigaciones contra el narcotráfico y el blanqueo en el entorno del Campo de Gibraltar. Zaragoza, según ha explicado este jueves la Fiscalía General, realizará esta labor en coordinación y “sin menoscabo de las funciones” que mantienen en esta materia la Fiscalía Especial Antidroga y las fiscalías territoriales de la zona.
La decisión de Delgado implica el regreso de Zaragoza, fiscal de Sala del Supremo, a la materia a la que ha dedicado gran parte de su carrera y en la que, como teniente fiscal de la Fiscalía Antidroga, dirigió las grandes investigaciones contra el narcotráfico en Galicia, que culminaron entre otras, con la Operación Nécora. En la Fiscalía Antidroga coincidió con Delgado, quien lo sustituyó temporalmente en la jefatura cuando Zaragoza fue nombrado jefe de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
El nuevo cargo de Zaragoza llega semanas después de que se viera truncada su aspiración de alcanzar el puesto de fiscal jefe de Sala del Tribunal Supremo, al que presentó su candidatura pero para el que Delgado eligió finalmente al fiscal José Javier Huete. En su última etapa en el Supremo, Zaragoza formó parte del equipo de cuatro fiscales que dirigieron la investigación contra el procés y que siguen estando al frente de los rescoldos pendientes de esta causa en el Tribunal Supremo, como la reciente concesión del tercer grado penitenciario a los líderes independentistas presos. Al frente de la investigación contra el desafío secesionista, Zaragoza se convirtió en un firme defensor de la línea más dura contra los dirigentes catalanes y capitaneó la acusación del delito de rebelión, bajo la que fueron encarcelados y sentados en el banquillo los líderes independentistas, pero que fue finalmente desestimada por el Tribunal Supremo.