14 fotos

Las lagunas en el México de la sequía

El país enfrenta una sequía que se extiende a más del 80% de su territorio.

La falta de lluvias, la transformación del suelo y la mala gestión del agua condenan al país a repetir la agonía de temporadas extremadamente secas cada década con sus consecuencias sociales y económicasHector Guerrero
Ermeregildo Martínez lleva más de 20 años siendo pescador. Solía pescar en la laguna del Farallón, una reserva de agua natural dulce que alimentaba a 200 familias que vivían de la pesca. Hace ocho meses comenzaron a notar que el descenso del nivel del agua era cada vez más acentuado hasta que ni siquiera quedó lo suficiente como para cubrir las rodillas de los pescadores.Hector Guerrero
Los vasos lacustres del país han sido de las zonas más afectadas.Hector Guerrero
Mariano Tribuna otro pescador afectado, recorre la zona más critica del Farallón.Hector Guerrero
Los cayucos varados en las orillas de la laguna Farallón. México es carnaza para las sequías, un fenómeno que ha marcado varias veces su historia. La localización y su clima hacen al país especialmente vulnerable de tener épocas de escasez de lluvias y épocas húmedas.Hector Guerrero
En la laguna Farallón de Veracruz el panorama es más que desolador, en tan solo seis meses ha perdido más del 80% de su capacidad.Hector Guerrero
Un pelícano yace en el suelo tras quedar atorado en el fango en busca de agua.Hector Guerrero
La parte central de la laguna de Cuitzeo en el Estado de Michoacán, es actualmente un terreno desierto.Hector Guerrero
La isla de la laguna hoy en día es una zona a la que se puede acceder caminando.Hector Guerrero
El tradicional paisaje de la carretera que atraviesa la laguna se ha convertido en la imagen que representa el impacto en la zona.Hector Guerrero
Un vaquero cabalga en la parte más profunda de lo que fuera la laguna de Cuitzeo.Hector Guerrero
El ganado cruza la laguna en busca de agua.Hector Guerrero
La falta del vital liquido ha afectado a cientos de ganaderos de todo el país.Hector Guerrero
Niños juegan en las orillas de la laguna de Cuitzeo.Hector Guerrero