Doña Sofía vuelve al escenario del rifirrafe con la reina Letizia

La madre de Felipe VI comienza sus vacaciones de Semana Santa en Palma con un concierto benéfico, a la espera de la misa de Pascua del próximo domingo

La reina Sofía, junto a su hermana Irene de Grecia, en Palma, este lunes.GJL (GTRES)

Las vacaciones de Semana Santa ya han empezado para la Familia Real. La reina Letizia y sus hijas, Leonor y Sofía, están en Roma, donde viajaron el pasado viernes en un avión de línea regular. A ellas está previsto que se una estos días el rey Felipe VI y juntos disfru...

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Las vacaciones de Semana Santa ya han empezado para la Familia Real. La reina Letizia y sus hijas, Leonor y Sofía, están en Roma, donde viajaron el pasado viernes en un avión de línea regular. A ellas está previsto que se una estos días el rey Felipe VI y juntos disfrutarán de esta escapada privada como máximo hasta el fin de semana, cuando se celebre en Palma de Mallorca la tradicional misa de Pascua. Allí, en Palma, ya se encuentra la reina Sofía que acudió este lunes al concierto benéfico organizado por Proyecto Hombre en la capital balear.

Se trata de un recital del Requiem de Mozart que ofrece la orquesta Sinfónica balear y la Coral Universitat y al que la Reina acude cada año como invitada de honor habitual. Sentada en primera fila junto a su hermana la princesa Irene de Grecia y las autoridades correspondientes, doña Sofía volvió a disfrutar de este espectáculo que llenó un año más el aforo de la catedral mallorquina. Estos días doña Sofía también tiene previsto visitar algunas instalaciones, como el Aquarium de Palma y, como viene siendo habitual, presenciará algunas de las procesiones, entre ellas la procesión del Sant Enterrament del Viernes Santo, como ocurrió el año pasado cuando acudió junto a su hermana.

El próximo domingo asistirá junto a los Reyes y sus hijas a la tradicional misa de Pascua, un encuentro que genera gran expectación después del rifirrafe que protagonizaron el año pasado la madre y la esposa de Felipe VI en el momento en el que posaban para los fotógrafos a la salida de la catedral. Las imágenes de la reina Letizia intentando evitar una foto de su suegra con sus hijas dieron la vuelta al mundo. La situación se interpretó como un desencuentro y cuestionó la relación entre ambas.

Los Reyes, con sus hijas y los Reyes eméritos. JAIME REINA (AFP) / ATLAS

Tras esa escena llegaron otras en la que escenificaron una  complicidad con la que ambas intentaron acallar las noticias que incidían en la tensión que existía entre ellas. Aconsejados por expertos en imagen, pocos días después del desencuentro los Reyes y sus hijas acudieron a ver a don Juan Carlos al hospital en el que había sido operado de una rodilla. Doña Letizia hasta abrió la puerta del coche a su suegra, en un gesto inusual, y las niñas dieron la mano a su abuela sin despegarse de ella un minuto. Luego fueron al teatro juntas y este verano hasta visitaron las cuatro un mercado de pescado en Palma.

Pero de puertas para dentro en el palacio de La Zarzuela pocas cosas han cambiado. Doña Letizia marca las reglas en su casa y sus hijas ven a sus abuelos paternos menos de lo que a ellos les gustaría, aunque viven a escasos metros en el recinto de La Zarzuela. A diferencia de lo que ocurre con los hijos de Elena y Cristina, que frecuentan bastante más a los reyes eméritos. Mientras, doña Sofía hace vida con su hermana Irene y don Juan Carlos viaja y se reúne con sus amigos. De hecho, la misa de Pascua del año pasado supuso el regreso a esta cita del rey emérito, que no participaba en ella desde 2014, cuando se produjo el relevo en la Corona. No se sabe si este año asistirá de nuevo.

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