El plástico asesino
Un reportaje sobre la contaminación plástica de los océanos me llegó al corazón, a mi alma humana cómplice y congelada. Nuestra estupidez es ilimitada; creemos tener una sociedad mejor y más desarrollada pero que, en realidad, destruye brutalmente este planeta. Producimos millones de toneladas de plástico que rebosan los mares. Hay manchas de plásticos cuya extensión equivale a la de España, que destruyen la vida de la fauna marina y, por tanto, la nuestra. Mientras, nosotros andamos preocupados por miserias políticas o por otros temas irrelevantes. Ahora, la solución debe ser global y de cada...
Un reportaje sobre la contaminación plástica de los océanos me llegó al corazón, a mi alma humana cómplice y congelada. Nuestra estupidez es ilimitada; creemos tener una sociedad mejor y más desarrollada pero que, en realidad, destruye brutalmente este planeta. Producimos millones de toneladas de plástico que rebosan los mares. Hay manchas de plásticos cuya extensión equivale a la de España, que destruyen la vida de la fauna marina y, por tanto, la nuestra. Mientras, nosotros andamos preocupados por miserias políticas o por otros temas irrelevantes. Ahora, la solución debe ser global y de cada uno de nosotros. Concretemos en algunas acciones como minimizar el uso de los plásticos y premiar desde los Gobiernos a las empresas que los reciclan; recoger las basuras plásticas de los mares y que los gastos sean pagados con fondos estatales; buscar alternativas I+D como pueden ser las recientes enzimas descubiertas en Reino Unido o en EE UU que pueden destruir el plástico, etcétera.
Este es un llamamiento de socorro para quien quiera oírlo. Aunque, tal vez, ya sea tarde.— Mario Gestoso.