La Navidad trajo más bicis a la Gran Vía

El dispositivo especial de Navidad —que limitó el acceso de los coches a la Gran Vía y aumentó el espacio para los peatones en 5.400 metros cuadrados— provocó que circulasen por la vía un 26% más de bicicletas en comparación con un día normal. También creció el uso de BiciMad: un 55% (que debido a las mejoras en el servicio creció entre 2016 y 2017 un 17%). Estas son algunas de las ...

El dispositivo especial de Navidad —que limitó el acceso de los coches a la Gran Vía y aumentó el espacio para los peatones en 5.400 metros cuadrados— provocó que circulasen por la vía un 26% más de bicicletas en comparación con un día normal. También creció el uso de BiciMad: un 55% (que debido a las mejoras en el servicio creció entre 2016 y 2017 un 17%). Estas son algunas de las conclusiones del Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, que valoró esta semana la medida.

“El dispositivo ha sido un éxito. Ha funcionado mejor que ningún año”, dicen desde el Consistorio. Durante la aplicación de las restricciones —que limitaron el acceso a la vía de manera intermintente entre el 1 de diciembre y el 8 de enero—, en la icónica calle disminuyó el tráfico rodado en un 37%. Lo mismo sucedió en sus alrededores: los vehículos descendieron un 24% en la Cuesta de San Vicente; 19% en Princesa; 7% en el Paseo del Prado y 6% en el Paseo de Recoletos.

Desde Movilidad remarcan que “es el primer año que no se han producido limitaciones de acceso en la M-30 debido a problemas de congestión”. Cuando se saturaba el centro en Navidad, se controlaba el número de vehículos en la circunvalación de Madrid. Así, en 2015 hubo seis cortes y en 2016, tres.

La consecuencia directa de esta reducción de vehículos fue un aumento de los peatones: una media de 7.300 por hora. Tras la Navidad, la Gran Vía ha mantenido sus aceras ensanchadas, pues este diseño va a definir el futuro estado de la avenida madrileña.