Valorar la Transición
Hace pocos días pude ver cómo, en una tertulia de televisión, un diputado elegido en las últimas elecciones calificaba de “anticuado carcamal” a un contertulio cuando este mencionaba positivamente la mayoría de avances y logros sociales y políticos de la Transición de 1977. De mis recuerdos de esa época debo añadir que la gente de los barrios, de las asociaciones de vecinos, de las asambleas y los sindicatos creíamos (y creemos) que tenían un gran valor nuestras masivas manifestaciones de apoyo a los grupos políticos, organizados para pasar de la dictadura a la democracia. Desde la vuelta de T...
Hace pocos días pude ver cómo, en una tertulia de televisión, un diputado elegido en las últimas elecciones calificaba de “anticuado carcamal” a un contertulio cuando este mencionaba positivamente la mayoría de avances y logros sociales y políticos de la Transición de 1977. De mis recuerdos de esa época debo añadir que la gente de los barrios, de las asociaciones de vecinos, de las asambleas y los sindicatos creíamos (y creemos) que tenían un gran valor nuestras masivas manifestaciones de apoyo a los grupos políticos, organizados para pasar de la dictadura a la democracia. Desde la vuelta de Tarradellas a las primeras elecciones municipales de 1979, el movimiento popular y cívico de los barrios y pueblos fue incesante y muy activo. Si el pacto que se alcanzó, restablecer el funcionamiento democrático entre los poderes políticos y los franquistas, se considera ahora insuficiente, afirmo que, a petición de los demócratas, el esfuerzo de la gente de la calle no hubiese cesado. Me parece del todo injusto devaluar la Transición; creo que quienes así piensan no han sopesado la clase de régimen dictatorial del que, entre todos, nos liberamos en aquellos años.— Jaume V. Muntadas.