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Sobrevivieron a Boko Haram

Más de 1.5 millones de personas han buscado refugio en Maiduguri tras escapar de la violencia en el nordeste de Nigeria. La mayoría de ellos han perdido todo después de huir para salvar sus vidas.

19 jun 2015 - 10:29CEST

Decenas de voluntarios de la Cruz Roja de Nigeria, junto con 70 trabajadores, están ayudando al CICR a distribuir alimentos a 8.500 familias en Maiduguri. El CICR tiene previsto distribuir alimentos entre otras 500.000 personas.Jesús Serrano Redondo (CICR)

Las mujeres embarazadas han tenido que dar a luz en circunstancias sumamente difíciles y a veces se han visto forzadas a abandonar a sus hijos recién nacidos para salvar su propia vida.Jesús Serrano Redondo (CICR)

Mujeres desplazadas, en un punto de distribución de ayuda del CICR en Maiduguri, Nigeria.Jesús Serrano Redondo (CICR)

Las personas ancianas también se han visto afectadas por el conflicto. La mayoría de ellos tuvieron que caminar por las montañas durante 3 días sin comida, medicamentos y apenas agua, dejándolo todo atrás, hasta llegar a un lugar a salvo.Jesús Serrano Redondo (CICR)

Más de 1,5 millones de personas han buscado refugio en Maiduguri tras escapar de la violencia en el nordeste de Nigeria. La mayoría de ellos han perdido todo después de huir para salvar sus vidas.Jesús Serrano Redondo (CICR)

75.000 pacientes, incluidos los desplazados internos y la población residente en el estado de Borno, ahora pueden acceder a atención médica preventiva y curativa en el centro de atención primaria de salud de Mala Kachala, rehabilitado por el CICR.Jesús Serrano Redondo (CICR)

La situación de los desplazados por la violencia en el nordeste de Nigeria, especialmente las mujeres y niñas, es extremadamente difícil. Las comunidades han sido separadas, los niños no pueden ir a la escuela y la mayoría de los afectados ha perdido todo.Jesús Serrano Redondo (CICR)

Natisa (derecha) vive en un campamento para personas desplazadas desde marzo de 2015. Cuando llegó, se encontró con su padre, que sufre de diabetes y tuvo que huir sin sus medicamentos, su hermana, su cuñado y su padre, también desplazados por el conflicto. No ha visto a su esposo desde que tuvo que huyó de Gulak hace ocho meses. Su marido aún no conoce a su hijo recién nacido.Jesús Serrano Redondo (CICR)

Muchos niños tuvieron que huir sin sus familias cuando la violencia estalló en sus pueblos. Los equipos de la Cruz Roja han registrado cientos de niños no acompañados y facilitado miles de llamadas telefónicas para restablecer el contacto entre familiares.Jesús Serrano Redondo (CICR)

El CICR y la Cruz Roja nigeriana están realizando actividades a gran escala para ayudar a la población afectada por el conflicto en el noreste de Nigeria. Desde diciembre de 2014, bienes de primera necesidad y comida se han distribuido a más de 200.000 personas, al igual que agua potable y asistencia sanitaria.Jesús Serrano Redondo (CICR)