Cartas al director

Momento histórico

¿Quién estableció que la política de este país sería desde la transición democrática territorio de dos grandes partidos, con la excepción de UCD? Ya era el momento de votar a personas, comportamientos, miradas a los ojos y máxima honestidad. Son nuestros legítimos representantes, no puede haber ningún atisbo de duda o falsedad. Estas elecciones locales de 2015 son históricas para nuestro país y se estudiarán en el colegio. Los grandes partidos ya no arrinconarán por más tiempo a las demás formaciones. La política es de todos, no de unas siglas, ni de unos cuantos. Urgía esta regeneración democ...

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¿Quién estableció que la política de este país sería desde la transición democrática territorio de dos grandes partidos, con la excepción de UCD? Ya era el momento de votar a personas, comportamientos, miradas a los ojos y máxima honestidad. Son nuestros legítimos representantes, no puede haber ningún atisbo de duda o falsedad. Estas elecciones locales de 2015 son históricas para nuestro país y se estudiarán en el colegio. Los grandes partidos ya no arrinconarán por más tiempo a las demás formaciones. La política es de todos, no de unas siglas, ni de unos cuantos. Urgía esta regeneración democrática y esta apertura al diálogo y a la política sana, de personas normales, sin disfraces. Solo nos merecen los políticos intachables que solo trabajan para la comunidad.— Diego Gavilán. Alicante.

El voto del cabreo ha sido el gran protagonista de estas elecciones. Creo que solo desde el enfado, la rabia y el castigo contra PP-PSOE se apoya con esa fuerza y confianza ciega a partidos emergentes con nula experiencia, con ideas poco trabajadas y consistentes en vender promesas difíciles de cumplir dentro de unos presupuestos cerrados y limitados, como son los municipales y autonómicos. Votar con el hígado en lugar de con la cabeza a veces puede funcionar en nuestras secundarias y sencillas comunidades de vecinos, pero, en cuestiones políticas vitales para la convivencia y la gestión del Estado de derecho, creo que se puede necesitar exigir más meditación, más profesionalidad y más formación y práctica. Nuestras urnas democráticas han hablado; desde hoy toca entenderse y... a ver las consecuencias de esta inestabilidad.— David García. Madrid.

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