Los pigmeos de Camerún quieren volver a la selva, lugar donde han habitado durante siglos hasta que el Gobierno lo prohibió
Camerún -
Las viviendas tradicionales se construían con finos troncos cortados de la selva y que las mujeres colocaban pacientemente en surcos cavados a golpe de machete y reblandecidos con agua. Las grandes hojas de palma hacían las veces de techado.Juanjo PérezAunque hay organizaciones que trabajan con ellos para intentan paliar esta situación, es muy frecuente ver a los 'baka' consumiendo alcohol y fumando tabaco durante todo el día.Juanjo PérezSon especialmente populares unos pequeños 'sachets' de cinco centilitros que contienen alcohol de más de 40 grados, normalmente en forma de whisky o ginebra.Juanjo Pérez
Las mujeres no abandonan la costumbre de las bolsitas alcohólicas ni siquiera durante el embarazo ni la lactancia, por lo que los niños tienen, ya desde muy pequeños, un temprano e involuntario contacto con la bebida.Juanjo PérezLos 'baka' mantienen su tradicional apego a la familia y siempre tratan de reunirse para comer todos juntos: mujeres, hombres y niños.Juanjo PérezUn pequeño huerto en la parte trasera del asentamiento les abastece de algunos alimentos, como el maíz que muestra aquí Alphonse. Antes los pigmeos obtenían los frutos directamente de la selva, pero han tenido que aprender nuevas costumbres sedentarias.Juanjo Pérez
También encontraban en la selva los ingredientes para elaborar sus remedios tradicionales. Ahora les cuesta encontrarlos y han comenzado a padecer enfermedades que nunca antes habían experimentado y que no saben cómo tratar.Juanjo PérezCuando no hay posibilidad de acceder a los 'sachets', el sustituto más popular es el vino de palma. Este alcohólico líquido blanco se obtiene de la destilación directa de la planta y goza de gran presencia en la región de África occidental.Juanjo PérezEn los días de fiesta, el poblado se reúne para bailar y cantar. Samson mueve con energía el abalé: un instrumento local hecho con rafia y un cilindro metálico que, agitado al ritmo de las caderas, crea un sonido a medio camino entre el cencerro y las maracas.Juanjo PérezJulie atraviesa la carretera cargada con un ramillete de troncos que acaba de coger para construir una cabaña. La carretera se ha convertido en una ineludible barrera de asfalto que divide su antigua y su nueva vida.Juanjo PérezLos principales usuarios de la carretera son intermitentes camiones que trasladan los enormes troncos desde la selva hasta la ciudad costera de Douala para su posterior exportación.Juanjo Pérez
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