Justificando el fraude

Es lo que nos faltaba por oír. Nos dice Miguel Cardenal Carro, nada menos que un secretario de Estado, que el hecho de que, por ejemplo, Iniesta marcara un gol decisivo puede situar a un club deportivo en una especie de limbo fuera de la ley, de modo que querer saber si dicho club deportivo defrauda o no a la Hacienda pública es una “desmesura” y un “acoso”.

 Supongo que también lo es el exigir que todos los clubes deportivos de este país (sí, todos, para que no nos acusen de perseguir a nadie) paguen lo que deben a la Hacienda pública y a la Seguridad Social. No digamos ya si lo que pe...

Es lo que nos faltaba por oír. Nos dice Miguel Cardenal Carro, nada menos que un secretario de Estado, que el hecho de que, por ejemplo, Iniesta marcara un gol decisivo puede situar a un club deportivo en una especie de limbo fuera de la ley, de modo que querer saber si dicho club deportivo defrauda o no a la Hacienda pública es una “desmesura” y un “acoso”.

 Supongo que también lo es el exigir que todos los clubes deportivos de este país (sí, todos, para que no nos acusen de perseguir a nadie) paguen lo que deben a la Hacienda pública y a la Seguridad Social. No digamos ya si lo que pedimos es que se les investigue por si las mismas prácticas presuntamente fraudulentas las han empleado también otros clubes. Al parecer sería una completa falta de “rigor”.

Mi conclusión es que voy a montar con mis amigos un club para jugar al julepe a ver si así nos ahorramos lo que pagamos cada año a Hacienda. Los momentos memorables que podemos pasar gracias al julepe lo justificarían... ¿O no?— Miguel Ángel de la Casa de Julián.