La fiscal pide ocho años de internamiento para el menor que transportó los explosivos del 11-M
El inicio del juicio se ha fijado para el 15 de noviembre y el ministerio público pide que sea a puerta cerrada
La Fiscalía de la Audiencia Nacional solicitará ocho años de internamiento en régimen cerrado y otros cinco más de libertad vigilada, además de ocho años de inhabilitación absoluta, para el menor Gabriel M.V., alias El Gitanillo, acusado de haber transportado entre Asturias y Madrid parte de los explosivos utilizados el 11-M. El inicio del juicio, el primero relacionado con los atentados, se ha fijado para el 15 de noviembre.
Según han informado fuentes jurídicas, la fiscal del caso imputa a El Gitanillo un delito de tenencia de explosivos con fines terroristas en el escri...
La Fiscalía de la Audiencia Nacional solicitará ocho años de internamiento en régimen cerrado y otros cinco más de libertad vigilada, además de ocho años de inhabilitación absoluta, para el menor Gabriel M.V., alias El Gitanillo, acusado de haber transportado entre Asturias y Madrid parte de los explosivos utilizados el 11-M. El inicio del juicio, el primero relacionado con los atentados, se ha fijado para el 15 de noviembre.
Según han informado fuentes jurídicas, la fiscal del caso imputa a El Gitanillo un delito de tenencia de explosivos con fines terroristas en el escrito de alegaciones presentado hoy miércoles al juez central de menores, José María Vázquez Honrubia, quien ha dado un plazo de cinco días hábiles a la defensa del menor para que entregue su escrito de conclusiones.
El inicio del juicio, el primero relacionado con los atentados del 11 de marzo, se ha fijado para el próximo 15 de noviembre, ya que debe tener lugar antes de que, a mediados de diciembre, venza el plazo máximo de internamiento preventivo del menor. Su internamiento fue decretado por tres meses el pasado 16 de junio -tres días después de su detención en Avilés (Asturias)- y prorrogado por otros tres meses en septiembre.
De Asturias a Madrid cargado de explosivos
En la declaración que prestó ante el juez el 16 de junio, Gabriel, de 16 años, dijo que, a principios de febrero de este año, el ex minero Emilio Suárez Trashorras, acusado de haber facilitado los explosivos a los autores de los atentados del 11-M, le propuso viajar de Asturias a Madrid en un autocar de línea y transportar una bolsa de deportes que contenía entre 15 y 20 kilos de dinamita. El Gitanillo añadió que cogió el autobús en Oviedo y que cuando llegó a la estación de Méndez Alvaro, en Madrid, llamó a un teléfono móvil que le había dado Trashorras y habló con "un moro" -supuestamente Jamal Ahmidam, El Chino, que el 3 de abril se suicidó junto a otros seis terroristas en Leganés- que se desplazó hasta allí y recogió la bolsa.
El menor aseguró que al menos otras dos personas -Sergio Álvarez y Antonio Iván Reiss Palacios, detenidos días después de que los identificara en su declaración y que quedaron en libertad después de declarar en la Audiencia Nacional- habían realizado viajes similares antes que él. También se mostró seguro de que los explosivos habían sido sustraídos de la mina Conchita por el ex minero, y afirmó que cuando El Chino acudió a Asturias a recoger la Goma 2 Suárez Trashorras le dijo: "No os olvidéis de coger las puntas y los tornillos".
Sin embargo, las muestras de metralla -puntas y tornillos- recogidas en junio pasado por la Guardia Civil en la mina Conchita no coinciden con la empleada en los atentados del 11 de marzo, según las conclusiones del informe pericial. La fiscal solicita en su escrito de alegaciones que en el juicio a Gabriel M.V. comparezcan más de una docena de testigos, entre ellos Suárez Trashorras, y que se celebre a puerta cerrada, en aplicación del artículo 35.2 de la Ley del Menor, que establece que "el juez podrá acordar, en interés del imputado o de la víctima, que las sesiones no sean públicas".