El PP hace valer su mayoría para evitar que el Gobierno explique la actuación del CNI

La oposición exige al Ejecutivo la filtración a la prensa del informe de los servicios secretos

La Mesa de la Diputación Permanente del Congreso ha rechazado, gracias a los votos del PP, la propuesta de la oposición para que el Gobierno comparezca ante la Cámara Baja y explique la actuación del Centro Nacional de Inteligencia y del propio Ejecutivo (CNI) con respecto a la reunión de Carod Rovira con la cúpula de ETA y la filtración a la prensa del informe de los servicios secretos.

El PSOE había pedido que el presidente del Gobierno, José María Aznar, compareciera ante la Diputación Permanente para dar explicaciones sobre el comportamiento de los servicios secretos en la entrevist...

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La Mesa de la Diputación Permanente del Congreso ha rechazado, gracias a los votos del PP, la propuesta de la oposición para que el Gobierno comparezca ante la Cámara Baja y explique la actuación del Centro Nacional de Inteligencia y del propio Ejecutivo (CNI) con respecto a la reunión de Carod Rovira con la cúpula de ETA y la filtración a la prensa del informe de los servicios secretos.

El PSOE había pedido que el presidente del Gobierno, José María Aznar, compareciera ante la Diputación Permanente para dar explicaciones sobre el comportamiento de los servicios secretos en la entrevista de Carod con la banda terrorista.

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CiU había reclamado a la presidenta de la Cámara que arbitrase alguna fórmula para que el Gobierno diera cuenta de esta polémica a los portavoces de los grupos parlamentarios. Entre tanto, Coalición Canaria había defendido la necesidad de que el Ejecutivo aclarase este episodio cuanto antes.

Las razones del PP

Los tres representantes del Partido Popular en la Mesa (mayoría frente a los dos del PSOE) fundamentan su decisión en las "posiciones doctrinales y la práctica unánime de anteriores legislaturas", ya que desde la cuarta legislatura no se realizan comparecencias en periodos de Cortes disueltas. Además, rechazan por "erróneos" los precedentes de 1982 y 1985 que esgrimian los socialistas. De hecho, en vísperas de la llegada del PP al poder tampoco se admitieron por unanimidad comparecencias del Gobierno socialista en temas "tan candentes" como los GAL.

Por su parte, los dos miembros del PSOE en la Mesa han sostenido que la interpretación del PP lleva "al absurdo", según la vicepresidente segunda de la Cámara, Amparo Rubiales, de pensar que durante los tres o cuatro meses en los que la Cámara esté disuelta "el Gobierno pueda hacer lo que quiera sin estar sujeto a ningún tipo de control".

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