El voto en contra de Batasuna obliga al Gobierno vasco a prorrogar los presupuestos de 2003

Sozialista Abertzaleak, el grupo parlamentario sucesor de la ilegalizada Batasuna, ha conseguido tumbar los presupuestos vascos. El presidente de la Cámara de Vitoria, Juan María Atutxa, no ha permitido una votación parcial, ya que los radicales pretendían apoyar únicamente las cuentas destinadas a EA. La maniobra de Atutxa responde a la promesa del PNV de no pactar con Batasuna. Con los votos de la oposición en contra, habrá prórroga de los presupuestos de 2003.

Los abertzales habían anunciado que se abstendrían en la votación de las secciones presupuestarias de los Depar...

Sozialista Abertzaleak, el grupo parlamentario sucesor de la ilegalizada Batasuna, ha conseguido tumbar los presupuestos vascos. El presidente de la Cámara de Vitoria, Juan María Atutxa, no ha permitido una votación parcial, ya que los radicales pretendían apoyar únicamente las cuentas destinadas a EA. La maniobra de Atutxa responde a la promesa del PNV de no pactar con Batasuna. Con los votos de la oposición en contra, habrá prórroga de los presupuestos de 2003.

Los abertzales habían anunciado que se abstendrían en la votación de las secciones presupuestarias de los Departamentos de Educación, Justicia y Medio Ambiente, gestionadas por EA, y que votaría en contra del resto de áreas, que controla el PNV. La posición de SA hubiera originado la aprobación de una ley de presupuestos mutilada, tal y como sucedió hace dos años.

Sin embargo, el compromiso del lehendakari de no pactar con los abertzales se ha hecho hoy patente. Así, Atutxa no ha permitido la votación por separado de los capítulos presupuestarios, rechazando así el voto favorable de Batasuna a la ley de presupuestos. Esto ha obligado a Batasuna a decantarse en contra de las cuentas vascas, lo que ha originado el rechazo de la ley, que ha contado también con los votos en contra de PP y PSE. Pese a las ausencias de Josu Urrutikoetxea (SA), huido de la justicia, y Carlos Iturgaiz (PP), sancionado por manipular el escaño de Mayor Oreja, la oposición ha tenido la suficiente mayoría (37 miembros contra 36) para rechazar las cuentas del Ejecutivo vasco.

PP y Batasuna, "aliados" para "boicotear" al Gobierno

El resultado final de la votación ha desatado el enésimo enfrentamiento entre Gobierno vasco y PP por la situación de la sucesora de Batasuna en el Parlamento vasco. La vicelehendakari Idoia Zenarruzabeitia ha defendido la existencia de un pacto entre las formaciones que rechazaron las cuentas públicas, PP, PSE y Sozialista Abertzaleak, porque "son aliados objetivos" para "boicotear" la acción del Gobierno vasco. "A ver qué tienen que decir ahora Oreja, Arenas o Zapatero", ha dicho, preguntando a todos estos dirigentes "quién tiene pactos con Batasuna y quién usa los votos para torpedear al Ejecutivo vasco". A su juicio, a PP y PSE "no les importa, en absoluta, la buena marcha de este país", sino "ver si bloquean a este país".

Muy distinta lectura ha extraído el portavoz parlamentario del PP, Leopoldo Barreda, que cree que lo vivido hoy en la Cámara no es más que otro episodio del "forcejeo de fondo" que en este momento se produce entre nacionalistas. El fondo de la disputa, según Barreda, es el plan Ibarretxe y la búsqueda del respaldo suficiente para impulsarlo. "Lo que importa es que esa hoja de ruta está vigente", ha apuntado el portavoz popular, que ha denunciado la "actuación irresponsable" del Gobierno vasco en materia presupuestaria. Según ha dicho, el Gobierno vasco ha planteado unas cuentas que sólo podían ser respaldadas por la formación radical. Barreda ha asegurado que no haber pactado finalmente las cuentas con Sozialista Abertzaleak no demuestra que el Gobierno vasco prescinda de este grupo para cerrar futuros acuerdos. "El único que se ha buscado, en uno u otro momento, ha sido con Batasuna", ha zanjado.