Dos de cada tres españoles de hasta 64 años trabajan, más que nunca

Son más que durante la burbuja del ladrillo, según los datos de la OCDE. España sigue registrando una tasa baja en comparación con el resto de países

Dos trabajadores montan un andamio, en Santander en octubre de 2024.Pedro Puente Hoyos (EFE)

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó este jueves un análisis de los datos de empleo de los 38 países que conforman el club. Una de las cifras que subraya el organismo es que 13 de esos países notifican un récord en su tasa de empleo, es decir, en la proporción de trabajadores respecto al total de personas en edad de hacerlo (de 15 a 64 años, según la ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó este jueves un análisis de los datos de empleo de los 38 países que conforman el club. Una de las cifras que subraya el organismo es que 13 de esos países notifican un récord en su tasa de empleo, es decir, en la proporción de trabajadores respecto al total de personas en edad de hacerlo (de 15 a 64 años, según la metodología de OCDE). España está entre ellos, con un 66,3%, un nivel altísimo en términos históricos: la cifra incluso supera la proporción alcanzada en la época de menor paro del siglo XX, en 2007 durante el éxtasis inmobiliario. El análisis es peor en comparación con otros países, ya que España sigue por debajo de la media de la OCDE (70,3%) y del promedio de la Unión Europea (70,9%). Además, registra la tasa de paro más alta.

El primer dato español es de 1999, cuando en España la tasa de empleo se limitaba al 52,9%. Esta cifra creció ininterrumpidamente en los años posteriores, hasta alcanzar un pico en el segundo trimestre de 2007. Entonces la tasa de empleo se elevó hasta el 65,9%, rozando los dos tercios de la fuerza laboral. El porcentaje cayó a plomo con el pinchazo de la burbuja del ladrillo y la crisis financiera global, hasta un 54,6% en el segundo trimestre de 2013. Por entonces, según el INE, España alcanzó su récord histórico de desempleados, con seis millones de personas en paro. La tasa de empleo volvió a crecer en los años posteriores, hasta dar otro bajón durante la pandemia, pero que rebotó enseguida. En el segundo trimestre del año pasado superó el récord que se alcanzó en 2007 y en el último dato, el del tercer trimestre de 2024, alcanza el 66,3%.

El dato español, con todo, está en el vagón de cola. De los 38 países que componen la OCDE, solo Chile (64,1%), México (63,9%), Colombia (63,2%), Grecia (63,1%), Italia (62,5%), Costa Rica (62,3%) y Turquía (55,2%) presentan peores datos que los españoles. Además, está lejísimos de los estados con mejores cifras: son Nueva Zelanda (78,4%), Japón (79,5%), Suiza (80,3%), Países Bajos (82,35) e Islandia (86,4%). Otra lectura, más positiva, es que España está entre los países en los que más mejora este registro: creció seis décimas porcentuales de 2023 a 2024, superando el incremento medio de la Unión Europea (0,5) y de la OCDE (0,2).

Al igual que España, otros 12 países alcanzaron en el tercer trimestre de 2024 la mayor tasa de empleo desde que hay registros. La mayoría son europeos, como Bélgica, Francia, Alemania o Italia, acompañados de Japón o Corea del Sur. Esto obedece a una tendencia global, con pirámides poblacionales que se estrechan en los años laborales y crecen en los del retiro. Otro termómetro de este fenómeno es la dificultad de las empresas para encontrar mano de obra en algunos países desarrollados.

“La tasa de empleo y participación en la fuerza laboral (tasa de actividad) de la OCDE se mantuvieron en general estables en el 70,3% y el 74% durante el tercer trimestre de 2024, marcando los niveles más altos registrados desde el inicio de las series en 2005 y 2008, respectivamente”, reflexiona la OCDE en un comunicado de prensa. “La tasa de empleo superó el promedio de la OCDE del 70,3% en aproximadamente dos tercios de los países de la OCDE en el tercer trimestre de 2024, con las notables excepciones de Italia y Francia entre los países del G7″, subraya el organismo.

Hay otra forma de medir la tasa de empleo, tomando en cuenta a todas las personas que pueden trabajar, de manera que no se excluye a los mayores. Así lo hace el Instituto Nacional de Estadística en la Encuesta de Población Activa. Al incluir en el cálculo a los de 65 años o más, España notifica una tasa de empleo aún menor, según la OCDE: es de un 51,5%, con solo tres países detrás. Son Turquía (49,5%), Grecia (47,3%) e Italia (46,8%). El registro español queda lejos de la media de los Veintiseite (54,7%), de la OCDE (58,1%) y de los países con proporciones más altas, como Islandia (74,5%).

Los datos de Eurostat vienen señalando a España como uno de los países en que menos personas en edad de jubilarse trabaja: solo uno de cada 20 compatibiliza empleo y pensión, un 5%, muy lejos del 13% promedio de la UE. Esta variable —que mide la situación laboral de los jubilados en los seis meses posteriores a recibir su primera prestación— es relevante ante el estrés que sufre el sistema de pensiones, en un contexto de envejecimiento y baja natalidad. El Gobierno, especialmente desde la legislatura pasada, viene aprobando incentivos para demorar la jubilación o para compatibilizarla con el empleo. Ese impulso legislativo está activando estas modalidades, pero aún no consiguen emparejar a España con el escenario europeo.

Otro reverso negativo para España en los datos de la OCDE es el de desempleo. Es el único país con una tasa de paro de dos dígitos, del 11,3%, muy por encima de la media de la OCDE (4,9%) y de la Unión Europea (5,9%).

Sobre la firma

Más información

Archivado En