Yolanda Díaz ve “margen para un acuerdo” con los empresarios en la reducción de la jornada
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo ve “buena voluntad” y celebra que la patronal “se tome en serio por primera vez” la mesa de diálogo social
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, espera “buena voluntad” de todas las partes cuando este miércoles se reúna la mesa de diálogo social para discutir la reducción de la jornada laboral. En declaraciones desde Bruselas, la también ministra de Trabajo y Economía Social ha celebrado que la patronal, por fin, “se toma en serio” estas negociaciones y se ha mostrado confiada en que hay “margen para un acuerdo”, que sería el primero en 40 años en la materia, ha recordado.
“Esperamos buena voluntad de las partes, que sigamos haciendo lo que sabemos hacer”, ha recalcado de cara a la cita de martes en Madrid. Para Díaz, la mesa de diálogo social es “una de las más importantes en la democracia (…) uno de los elementos institucionales que mejor funcionan en el país”.
La semana pasada, el Gobierno presentó un nuevo borrador de la reforma para reducir la jornada laboral a 38,5 horas este año y a 37,5 el que viene. Para acercar a la patronal, el texto reformulado amplía la capacidad de las empresas para redistribuir la jornada a lo largo del año que viene. Una concesión que busca satisfacer la demanda de mayor flexibilidad que vienen reclamando las patronales desde el inicio de las conversaciones.
Ante la nueva cita de la mesa, la vicepresidenta y responsable de Trabajo se ha mostrado confiada en la capacidad de avanzar progresivamente hacia un acuerdo con todas las partes. “Como vengo diciendo desde enero, hay margen para el acuerdo”, ha aseverado Díaz, que ha celebrado al respecto el cambio operado en la patronal en los últimos días: “Nos alegramos de que el pasado lunes sea la primera vez desde enero que la patronal se toma en serio la mesa, la respeta y se pone a trabajar”.
Díaz ha insistido en la necesidad de afrontar la cuestión de las horas de trabajo —“hace 40 años que no se ha abordado la reducción de la jornada laboral en España”, ha recordado—, y ha subrayado que no se trata de un cambio tan drástico: “La jornada media pactada en España ya es de 38,2 horas, por lo tanto, esta discusión se restringe mucho, por cuanto que estamos hablando de una reducción hasta 37 horas y media”.
La vicepresidenta considera, además, que los estudios internacionales avalan la tesis del Gobierno de que trabajar menos horas a la semana no afecta a la productividad. “Me remito al documento de la OCDE, no solamente no entorpece a creación de empleos, sino que es positivo para la productividad y España, igual que Europa, tiene un déficit de productividad”, ha puntualizado.
Tregua temporal
La tensión entre la ministra de Trabajo y el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, se ha rebajado tras la última reunión, dando pie a una especie de tregua. “Parece que estamos ahora de nuevo entrando en la negociación [...]. Podemos estar trabajando en estos momentos”, reconoció la semana pasada el líder de los empresarios.
Sin embargo, también lanzó un mensaje que no gustó nada al Gobierno, ni mucho menos a los sindicatos: “Haciendo un cálculo rápido, [la reducción de jornada propuesta] equivale a regalar casi 12 días de vacaciones pagadas por la empresa al año por decreto. Y, sin embargo, no hay ninguna sensibilidad con las empresas que, por ejemplo, contratan con la Administración. Las empresas hemos aguantado el tirón y nos merecemos un respeto”. Una afirmación que Pepe Álvarez, secretario general de UGT, rebatió recordando a Garamendi el “ahorro” de las empresas por el impago de las horas extraordinarias. “Ya que hablan de regalo, son 2.300 millones de euros al año”, le afeó.
La clave de bóveda para que CEOE y Cepyme se sumen al pacto parte de su reclamación de fórmulas que permitan reorganizar la jornada de trabajo ante los futuros recortes. Una de ellas sería la ampliación del límite de 80 horas extraordinarias anuales que limita la normativa —Francia, por ejemplo, permite 220—, y que Trabajo ya ha anunciado que no elevará. Fuentes de la negociación reconocen que esperan nuevos movimientos por parte del Gobierno en la mesa de este martes, de los que dependerá que la tregua siga vigente o que las posiciones se tornen definitivamente irreconciliables.
Sigue toda la información de Economía y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal