La justicia pone en aprietos a Iberdrola al obligarle a devolver parte del suelo en el que se asienta la mayor fotovoltaica de Europa

Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) obliga a Iberdrola a devolver a su dueño parte del suelo en el que se asienta la planta Núñez de Balboa, la fotovoltaica más grande de Europa, en el municipio de Usagre (Badajoz). El terreno en litigio fue inicialm...

Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) obliga a Iberdrola a devolver a su dueño parte del suelo en el que se asienta la planta Núñez de Balboa, la fotovoltaica más grande de Europa, en el municipio de Usagre (Badajoz). El terreno en litigio fue inicialmente expropiado para la construcción de la fotovoltaica y sobre el mismo, y antes de dicha expropiación, existía un contrato de arrendamiento por un periodo de 25 años. La planta extremeña, conectada a la red en abril de 2020, supuso un desembolso de 300 millones de euros para la eléctrica.

La energética española subraya que el procedimiento expropiatorio fue acometido “por la administración competente, siguiendo los procedimientos legalmente establecidos y respetándose todos los derechos y garantías existentes”. Y confía en que el fallo judicial, contra el que presentará un recurso en el Supremo, no acabará en el desmantelamiento de la instalación. Otra posible vía sería la renegociación del justiprecio establecido en la expropiación, una opción que evitaría el peor escenario para sus intereses, pero que elevaría sustancialmente el coste del terreno.

“Fraude de ley y abuso de derecho”

“Carece de fundamento alguno pedir la expropiación de unas fincas que meses antes nos hemos asegurado su disponibilidad mediante un contrato de arrendamiento por un periodo de 25 años. Es decir, la solicitud de expropiación carecía de causa o justificación para privar del derecho de propiedad”, se lee en la sentencia del tribunal extremeño, que reconoce el derecho a la “devolución in natura”, esto es, “al reintegro de las fincas libres de la planta fotovoltaica con todas sus instalaciones”. El texto habla de “fraude de ley y abuso de derecho” en el proceso de expropiación.

“El contencioso parte de uno solo de los tres propietarios de los terrenos en los que se encuentra la instalación. El 50% de este suelo es propiedad de dos arrendatarios que no han planteado en ningún momento reclamación alguna y que mantienen y responden al contrato suscrito en su momento (inicialmente, por los tres propietarios)”, esgrimen fuentes de la empresa presidida por Ignacio Sánchez Galán. La energética afirma que la instalación dispone de “todos los permisos para producir energía y seguirá funcionando con normalidad”.