Sanidad descarta exigir por el momento el certificado digital de vacunación para entrar en bares y discotecas
La ministra Darias frena el intento de algunas autonomías de darle un nuevo uso al pasaporte sanitario, una iniciativa que la titular de Turismo, Reyes Maroto, no descartó unas horas antes y lo dejó en manos del consejo interterritorial
Canarias y Galicia han abierto la veda en España con la petición del certificado digital europeo de la covid para acceder a recintos cerrados, bares o restaurantes en los municipios con alta incidencia. Y en el seno del Gobierno hay dudas al respecto. En la mañana de este miércoles, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, abrió la puerta a que esta práctica se extienda a todo...
Canarias y Galicia han abierto la veda en España con la petición del certificado digital europeo de la covid para acceder a recintos cerrados, bares o restaurantes en los municipios con alta incidencia. Y en el seno del Gobierno hay dudas al respecto. En la mañana de este miércoles, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, abrió la puerta a que esta práctica se extienda a todo el país. “Será en el consejo interterritorial [de Sanidad] donde se decida si se le da otros usos a los que tiene ahora mismo”, aseguró en una rueda de prensa telemática tras la conferencia sectorial de turismo. Sin embargo, unas horas después, la titular de Sanidad, Carolina Darias, negó la mayor y descartó este cambio, al menos por el momento. “El certificado se usará para lo que lo contempla la UE, para viajar, que es el amparo legal que tiene”, afirmó tras la reunión del consejo interterritorial.
Darias reconoció que algunas comunidades quisieron debatir sobre esta opción en el encuentro de este miércoles, aunque al no constar en el orden del día no se permitió tratar el tema. Una postura del Ejecutivo que impedía cualquier opción de que cambiase el uso del certificado y que lo que ya ocurre en Galicia o Canarias se pudiera extender al resto del país. “Lo importante y en lo que nos tenemos que centrar ahora es en la vacunación”, incidió Darias. Pese a ello, no se trata de una cuestión cerrada y fuentes de gobiernos autonómicos aseguran que volverán a intentar de tratar el tema en próximas reuniones.
De esta forma, el debate sigue abierto sobre si se puede limitar el acceso a espacios cerrados como bares o discotecas a las personas que no se hayan vacunado (ahora que la inmunización ha avanzado, sería una fórmula para convencer a los todavía indecisos), algo que ya realizan otros países europeos como Francia o Italia. Una opción que también se debate en Estados Unidos, donde existe una parte importante de la población contraria a vacunarse.
Para tener el pasaporte sanitario es necesario tener la pauta completa de la vacunación, un test negativo en las últimas 72 horas si es PCR o en las últimas 48 horas si es una prueba de antígenos, o haber pasado la enfermedad en los últimos seis meses. En origen, se aprobó para facilitar y homogeneizar los requisitos para los viajes entre Estados miembros. “Hay que dar las garantías jurídicas para que se pueda usar en la entrada a algunos establecimientos y que tenga usos distintos a los que se ha validado”, dijo Maroto.
Sobre el certificado digital, tanto Maroto como Darias han recordado que en España ya se han emitido 11,3 millones de documentos y que en el país ya hay 26 millones de personas con la pauta completa de la vacunación. Es decir, en caso de implantar esta medida, más de la mitad de la población ya cumplirían al menos con este requisito.
Presión en Europa
Algunos países europeos como Francia se han decantado por este camino. Aunque en ese caso no se trata solo de dar más seguridad sanitaria a eventos sociales o a la actividad de bares y restaurantes, sino para romper la tendencia bajista del ritmo de vacunación y convencer a una parte de la población reacia a inmunizarse contra la covid.
Queda la duda de cómo podría afectar esto a la actividad de la restauración y si le pondría todavía más trabas para su recuperación. Sin embargo, en el caso del ocio nocturno, muy castigado desde el inicio de la pandemia, parece que esta es la salida a una crisis que en su caso ha sido más compleja. De hecho, el sector ya pidió en junio poder usar este sistema para dar seguridad a los usuarios y facilitar su salida del túnel.
Optimismo para el verano
La ministra ha explicado asimismo los 23 planes de sostenibilidad turística aprobados en la conferencia, a los que se dedicará una inversión de 64 millones. Unos planes en los que Cataluña ha decidido no participar, aunque la titular de Turismo ha adelantado que sí lo hará en los planes extraordinarios con fondos europeos.
Además, sobre las previsiones turísticas para este verano, Maroto mantuvo la estimación de que se recupere la mitad del turismo internacional en el año sobre la cifra de 2019 y un 70% de los viajes nacionales. Una visión optimista, más si cabe tras los reveses de grandes mercados emisores como el Reino Unido (solo pueden viajar sin guardar cuarentena a su regreso los vacunados con pauta completa) o Alemania, que recomienda no viajar a España e incluso ya impone cuarentena a las personas no inmunizadas.
“Vemos una reactivación gradual, con cierta volatilidad por las restricciones de algunos mercados emisores. La información que tenemos sobre el impacto que puede tener la quinta ola en el turismo es de cierta cautela. Esta campaña turística es muy diferente a la del año pasado porque ya contamos con la vacunación y por eso vemos confianza en nuestro destino. Los datos de búsquedas y reservas son positivos y ya hemos recuperado el 73% de la capacidad aérea previa a la pandemia”, ha zanjado Maroto.
Los empresarios y expertos coinciden en esta visión positiva de la situación y esperan que la nueva ola de contagios no frene la recuperación turística. Si esto ocurriera, sería un mazazo para el rebote económico. Sin embargo, hasta al momento, según se ve en los datos de gasto en tarjetas de BBVA, el impacto sobre el gasto de la quinta ola es reducido si se compara con las anteriores.