Bruselas no encuentra motivos para mantener la investigación de las DTA
La Comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, envía una carta a Luis de Guindos en la que respalda la medida de cobrar a los bancos una tasa por los avales del Estado
La comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, remitió el pasado 5 de octubre una carta al ministro español de Economía, Luis de Guindos, en la que le comunica que tras la decisión adoptada por el Gobierno de cobrar a los bancos por los avales del Estado ya no considera necesario proseguir con la investigación iniciada por supuestas ayudas de Estado.
La comisaria se refiere en la misiva a las DTA, los activos fiscales diferidos, en sus siglas en inglés, unos créditos fiscales que el Gobierno permitió que los bancos españoles los contabilizaran como capital de primera calidad d...
La comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, remitió el pasado 5 de octubre una carta al ministro español de Economía, Luis de Guindos, en la que le comunica que tras la decisión adoptada por el Gobierno de cobrar a los bancos por los avales del Estado ya no considera necesario proseguir con la investigación iniciada por supuestas ayudas de Estado.
La comisaria se refiere en la misiva a las DTA, los activos fiscales diferidos, en sus siglas en inglés, unos créditos fiscales que el Gobierno permitió que los bancos españoles los contabilizaran como capital de primera calidad después de garantizarlos públicamente.
"En el supuesto de que los cambios propuestos (expuestos a la Comisión el 26 de septiembre de 2015) se implementan correctamente, considero que estos cambios abordan las preocupaciones de la Comisión de manera satisfactoria y no veo la necesidad de proseguir la investigación interna preliminar sobre la garantía que el Estado español concede sobre DTA bajo las normas sobre ayudas estatales. En consecuencia, daré las instrucciones pertinentes a mis servicios", señala la carta firmada por Vestager.
De esta forma, se espera que la Comisión Europea cierre definitivamente la investigación sobre el tratamiento fiscal de los DTA. La solución ideada por el Gobierno español tendrá un coste para la banca de unos 419 millones de euros a partir de 2016.
El Ejecutivo acordó con Bruselas que la banca podrá computar como capital de primera categoría unos 30.000 millones de los créditos fiscales provenientes de ejercicios en pérdidas, provisiones y planes de pensiones de sus trabajadores no realizados, si abona una tasa del 1,5% sobre parte de estos activos [la diferencia entre los impuestos pagados y los créditos fiscales pendientes].
Aunque la tasa es voluntario se espera que todas las entidades lo asuman porque, de lo contrario, bajaría su ratio de capital, un factor clave para el supervisor bancario. Los DTA a efectos fiscales permiten reducir los impuestos que se pagan por los beneficios logrados en ejercicios futuros, así como provisiones realizadas que son deducibles fiscalmente hasta que se materializa la pérdida.
"Tomo nota de que el análisis de la medida española sobre las DTA indica que, la garantía estatal refleja una compensación razonable a los bancos por el pago anticipado de impuestos. Sin embargo, la medida también tuvo la consecuencia no deseada beneficiar a los bancos de una garantía estatal que no podía ser justificada por un pago anticipado de impuestos, algunas de las cuales fueron concedidas en años en los que los bancos no pagan ningún impuesto en absoluto", explica la comisaria de Competencia.