El futuro, lejos del tajo

La construcción pierde 1,6 millones empleados en cinco años y pide ayuda

Viviendas en construcción en Madrid.Carlos Rosillo

Son los grandes sufridores de la crisis. Los primeros en notarla y los primeros en abandonar el mercado laboral. Los trabajadores de la construcción han visto cómo la burbuja inmobiliaria estallaba en sus manos y los recortes presupuestarios se cebaban con la obra pública. Si en el primer trimestre de 2008 el número de ocupados del sector superaba los 2,6 millones de personas, en marzo de este año apenas rebasa el millón, un 60% menos en apenas un lustro, después de que en los últimos tres meses 131.000 trabajadores perdieran su empleo.

Esta dramática evolución del trabajo en la constru...

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Son los grandes sufridores de la crisis. Los primeros en notarla y los primeros en abandonar el mercado laboral. Los trabajadores de la construcción han visto cómo la burbuja inmobiliaria estallaba en sus manos y los recortes presupuestarios se cebaban con la obra pública. Si en el primer trimestre de 2008 el número de ocupados del sector superaba los 2,6 millones de personas, en marzo de este año apenas rebasa el millón, un 60% menos en apenas un lustro, después de que en los últimos tres meses 131.000 trabajadores perdieran su empleo.

Esta dramática evolución del trabajo en la construcción no se corresponde, sin embargo, con el aumento de los parados. El primer año de la crisis arrancaba con menos de 300.000 que, apenas 12 meses después, se habían duplicado hasta rozar los 750.000 desempleados. Pero, a partir de ese momento, la cuenta se ha ido reduciendo. Hasta el punto de que el pasado mes de marzo los parados del sector rozaban los 377.000. Aunque este descenso no responde a nuevos contratos, sino a que muchos profesionales del tajo que llegaron a España al calor de boom inmobiliario han abandonado el país y otros muchos han cejado en su empeño de encontrar empleo por la inexistencia de obras.

Ante cifras así de contundentes, el futuro laboral de los profesionales del sector más denostado en España (la peculiaridad española, como se le describe tras esta crisis) se presenta complicado. Pese a que lo peor ya haya pasado, las alternativas que vislumbran los expertos consultados son escasas. Sobre todo cuando algunas de las grandes constructoras están abordando actualmente despidos colectivos (FCC y Acciona, entre ellas) y, aunque no los protagonicen, ninguna de las contactadas ha querido participar en un artículo que versaba sobre el porvenir de los profesionales de la construcción. Tampoco Seopan. ¿Lo verán tan negro como parece subyacer en su falta de respuesta?

Para el director general de la Fundación Laboral de la Construcción, Enrique Corral, “al sector podrán volver unas 300.000 personas de las que lo han tenido que abandonar. No podemos pensar en que la construcción vuelva a ser como antes”. Para el resto de los profesionales, Corral solo ve dos salidas: recualificación para continuar en la actividad o reinventarse a fin de emplearse en otro sector, dado que en este (tras los recortes, que aún no han tocado a su fin) “solo se van a quedar los mejores, debido a la gran oferta de candidatos que tienen las empresas”.

Los empresarios reclaman un plan de apoyo para crear

El año pasado, según los datos facilitados por el portal de empleo Infojobs, se publicaron cerca de 5.600 puestos vacantes en la categoría inmobiliaria-construcción, lo que representa una caída del 74% sobre las ofertas de empleo que se movían en 2008 y refleja el hundimiento que vive el sector. Sin embargo, se observa un ligero repunte, del 12%, entre 2011 y 2012. Un alza que continúa en el primer trimestre de este año, según el director adjunto de Infojobs, Antonio Gómez, con más de 2.000 vacantes en vez de las 1.200 del año anterior. Como consecuencia de ello, el crecimiento más importante lo experimenta el número de personas inscritas por cada oferta, 210 en 2012, frente a las 34 de 2008.

En el caso de Adecco, el personal demandante de empleo en la construcción subió un 6% el pasado ejercicio, según Daniele Tramontin, director del área de la empresa de trabajo temporal. En su base de datos constan 648.000 candidatos del sector, una actividad que ahora solo supone el 1,4% de la oferta de empleo total y que, en su opinión, aún está muy lejos de cambiar de signo. “Al menos durante tres o cinco años, el personal del sector de la construcción seguirá disminuyendo”, prevé.

Infojobs tiene a casi 728.000 apuntados con experiencia en construcción, si bien el portal observa un trasvase cada vez más intenso hacia otros sectores con mayor oferta de empleos.

Alternativas para los desempleados

En tanto el Gobierno decide si pone o no en marcha el cambio del modelo económico y el plan de rescate que demanda la construcción, las salidas que los especialistas ven para los profesionales del sector pasan fundamentalmente por la formación, los mercados exteriores y el reciclaje profesional, que gana fuerza.

Y es que, en opinión del director general de la empresa de recolocación GRI, Marcos Huergo, “la recolocación de los parados en el sector es casi imposible. La mayoría de los profesionales de la construcción tienen edades avanzadas y poca formación, lo mismo que muchos de los jóvenes que dejaron sus estudios para trabajar en la obra”.

GRI desarrolla varios programas de recualificación financiados con fondos europeos para que determinados territorios que basaban su sustento en la construcción o en sus industrias auxiliares puedan dar empleo a los trabajadores expulsados por la crisis (es el caso de Villacañas —Toledo—, dedicada a la fabricación de puertas, o de la construcción o la industria cerámica en Valencia). De los 475 trabajadores que han participado en el programa de Villacañas, indica Huergo, el 43% ha conseguido empleo; más de la mitad en el sector servicios, en cuanto solo un 16% en la construcción.

“Probar suerte fuera de España es lo indicado para los técnicos de alta cualificación. América Latina (sobre todo Brasil) y Oriente Próximo son una oportunidad para ingenieros eléctricos, civiles, técnicos..., perfiles que no conocen la crisis”, según el director de construcción de Adecco, Daniele Tramontin. Para el personal de menor formación, continúa, existe demanda en Alemania y Noruega, donde se buscan encofradores, carpinteros, fontaneros y electricistas; profesionales que en España carecen de idiomas, con lo que su mudanza se presenta harto complicada. De quedarse en España, existen oportunidades para perfiles muy específicos, como expertos en fiscalidad internacional, y en nichos como la rehabilitación y las reformas.

Aunque cree más fácil la inserción en otros sectores que exigen poca cualificación y generan puestos de trabajo, como la hostelería y los centros de atención telefónica, algo en lo que coincide Antonio Gómez, director adjunto de Infojobs, que suma las compras y la logística a las salidas anteriores.

La Fundación Laboral de la Construcción, que en 2010 lanzó el portal construyendoempleo.com a través del cual tiene “fichados” a 35.000 profesionales del sector, sobre todo personal de entre 35 y 45 años con experiencia, está comprobando cómo crece la demanda de trabajadores en otros países. Alemania, Argelia, Brasil, Perú, Francia… Los perfiles más demandados, indica su director general, Enrique Corral, son jefes y encargados de obra, encofradores y responsables de administración. “En Alemania se buscan aprendices de todo tipo de oficios para incluirles en un programa de formación dual de dos años. Entre diciembre y marzo hemos movido a un centenar de personas”, asegura.

La formación que recomienda la Fundación Laboral para que los profesionales despedidos puedan hallar un empleo pasa por especializarse en el manejo de maquinaria, cada vez más necesaria y con pocos especialistas; en la conducción de máquinas o porque los oficiales de obra se formen como encargados. El plan de rehabilitación y eficiencia energética aprobado por el Gobierno generará oportunidades sobre todo para aparejadores, ingenieros y arquitectos que se especialicen en eficiencia energética y para profesionales de menor cualificación en el terreno de la rehabilitación. Por ejemplo, albañiles que se formen en la aplicación de nuevas técnicas o el uso de nuevos productos químicos; especialistas en el descuelgue de fachadas e impermeabilización de cubiertas, explica Corral.

Para mejorar las perspectivas del sector, la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) ha reclamado esta semana al Gobierno un plan de ayuda para la construcción. Con una inversión de 9.000 millones de euros en obra civil durante tres años, explica su presidente, Juan Lazcano, se crearían 240.000 puestos de trabajo. Y con el impulso a la edificación, ligada a la financiación, a la rehabilitación residencial y a las medidas de eficiencia energética impulsadas por Bruselas, se podrían crear más de 140.000 empleos adicionales en ese plazo, continúa, con la convicción de que si no se recupera la construcción no se recuperará el empleo en España.

Para Toni Ferrer, secretario de acción sindical de UGT, “se han recortado las políticas activas de empleo que podrían estar reconvirtiendo a los parados de la construcción. Tampoco se está apostando por los mayores de 45 años y parados de larga duración, cuyos subsidios se han endurecido, además. Ni se está modificando el modelo productivo hacia la economía verde, que genera empleo”.

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