Traballo invierte 25 millones en la formación de trabajadores parados

Los sectores del metal, textil, alimentación, madera y construcción recibirán, a partir de marzo, una inyección de 25 millones de euros en ayudas para formación. Esta medida, que se ha de aprobar en el próximo Consello, responde al "plan de formación para empresas en sectores estratégicos" firmado ayer por la Consellería de Traballo y los representantes de CC OO, UGT, la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) y la Dirección Xeral de Formación. Estas ayudas pretenden ir en la misma línea de las ya ofrecidas para el automóvil. Se trata de costear la formación de los trabajadores que sufra...

Los sectores del metal, textil, alimentación, madera y construcción recibirán, a partir de marzo, una inyección de 25 millones de euros en ayudas para formación. Esta medida, que se ha de aprobar en el próximo Consello, responde al "plan de formación para empresas en sectores estratégicos" firmado ayer por la Consellería de Traballo y los representantes de CC OO, UGT, la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) y la Dirección Xeral de Formación. Estas ayudas pretenden ir en la misma línea de las ya ofrecidas para el automóvil. Se trata de costear la formación de los trabajadores que sufran Expedientes de Regulación de Empleo (ERE).

"Es el momento de duplicar esfuerzos para mitigar los efectos de la crisis", explicó ayer el secretario general de UGT, José Antonio Gómez. Sus compañeros de la mesa, "abierta permanentemente para hacer propuestas en situaciones de dificultad", lo suscribieron. "Tenemos especial interés en que haya industrias auxiliares que creen tejido competitivo", aseguró el conselleiro de Traballo, Ricardo Varela.

Estos cursos de reciclaje, calificados ayer de "medida excepcional", aparecen como una opción de recualificar personal para que puedan cambiar de sector. "Cuando pase el parón", afirmó Varela, "estarán mejor preparados". El conselleiro aclaró que se trata de un plan abierto a otros sectores, a todas aquellas empresas que tengan que programar paros temporales para no acumular excedentes. Como ocurrió con el plan para el automóvil, se amortiguan los efectos de los ERE: mientras se producen paros, tengan o no fecha tope, el trabajador acude a cursos y cobra un porcentaje del sueldo.