Sanidade dará asistencia psiquiátrica a los mayores por videoconferencia
Rubio promete que el sistema funcionará en los siete hospitales en 2010
En una residencia de ancianos de Ribeira, un médico del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago diagnostica y receta a su paciente. Habla con él, con su familia y con el facultativo del centro de mayores. Todo a través de una pantalla. De momento, la atención psiquiátrica a distancia es sólo un proyecto piloto, pero antes de 2011, anunció ayer la conselleira de Sanidade, María José Rubio, los siete hospitales de la red pública gallega tendrán unidades de atención psicogeriátrica. Es decir, los equipos humanos y técnicos necesarios para llevar a cabo la telemedicina.
Estas unidad...
En una residencia de ancianos de Ribeira, un médico del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago diagnostica y receta a su paciente. Habla con él, con su familia y con el facultativo del centro de mayores. Todo a través de una pantalla. De momento, la atención psiquiátrica a distancia es sólo un proyecto piloto, pero antes de 2011, anunció ayer la conselleira de Sanidade, María José Rubio, los siete hospitales de la red pública gallega tendrán unidades de atención psicogeriátrica. Es decir, los equipos humanos y técnicos necesarios para llevar a cabo la telemedicina.
Estas unidades específicas, formadas por dos profesionales de psiquiatría, uno de psicología clínica, un enfermero especialista en salud mental y un trabajador social, pasarán consulta mediante una videoconferencia a los pacientes que viven en residencias y no se pueden desplazar fácilmente.
"El envejecimiento de la población unido a la dispersión geográfica" justifican, según María José Rubio, la implantación de este programa de telepsicogeriatría. Los centros de mayores deberán solicitar las consultas a los centros hospitalarios más próximos.
El proyecto piloto del programa en la Residencia de Maiores de Ribeira fue un éxito, según su responsable, Raimundo Mateos. Se atendieron 32 teleconsultas de trastornos de conducta, ideación paranoide y deterioro cognoscitivo a 17 pacientes con una media de edad de 81 años. Pese a "algunas dificultades de audición", explica Mateos, todas las entrevistas por videoconferencia terminaron en diagnóstico. La telepsicogeriatría, continúa, "es una alternativa viable y satisfactoria a la consulta en el despacho". Mateos reconoce que dudaba de la aceptación de las nuevas tecnologías por parte de los pacientes, pero todos "reaccionaron sorprendentemente bien", asegura.
La atención psicogeriátrica, recordó la conselleira de Sanidade, es uno de los objetivos del Plan de Saúde 2006-2010 y del Plan Estratéxico de Saúde Mental 2006-2011.