Las grandes empresas acusan la crisis al disminuir sus ventas un 7%

La crisis comienza a pasar factura sin distinguir tamaños. Si los problemas de liquidez agravan la situación de las pymes, las compañías gallegas que integran la nómina de grandes empresas, con unas ventas que superan los seis millones de euros al año, acusan el entorno desfavorable con retrocesos en sus ingresos que rondaron de media el 7,4% en septiembre. Según las cuentas de los informes de recaudación de la Agencia Tributaria, que toma como referencia las declaraciones de IVA para realizar sus censos, las ventas declaradas por las grandes empresas cerraron el tercer trimestre del año con u...

La crisis comienza a pasar factura sin distinguir tamaños. Si los problemas de liquidez agravan la situación de las pymes, las compañías gallegas que integran la nómina de grandes empresas, con unas ventas que superan los seis millones de euros al año, acusan el entorno desfavorable con retrocesos en sus ingresos que rondaron de media el 7,4% en septiembre. Según las cuentas de los informes de recaudación de la Agencia Tributaria, que toma como referencia las declaraciones de IVA para realizar sus censos, las ventas declaradas por las grandes empresas cerraron el tercer trimestre del año con un retroceso del 6%, lo que sitúa la caída en el conjunto del año en el 4,3%.

Las 2.100 compañías no financieras con sede en Galicia que el fisco considera grandes empresas declararon el pasado septiembre unos ingresos totales de 5.007 millones de euros, de los cuales algo más de 4.200 millones fueron ventas al mercado interior, es decir, sin contar las exportaciones. El comportamiento de los ingresos de este selecto grupo, cuyo peso en las ventas totales se sitúa, según la Agencia Tributaria, en algo más de seis de cada diez euros facturados, arrastra un comportamiento negativo desde marzo, que se agravó al comienzo de la segunda mitad del año. Frente a registros positivos en los tres primeros trimestres de 2007, que oscilaban de media entre el 5,7% y el 2,7%, este año las tasas son negativas a un ritmo que multiplica por dos los descensos en las ventas cada trimestre: del 2% de caída en los tres primeros meses al 6% en el período comprendido entre julio y septiembre. Por las características propias de estas compañías, las mermas de su facturación se sitúan en parámetros similares a la media nacional, según Hacienda.

Los mayores retrocesos los sufre la industria y la construcción

En lo que va de año, los ingresos de esas 2.100 primeras empresas gallegas se situaron en 45.281,8 millones de euros, frente a los 64.024,3 millones con que cerraron 2007. Del informe de la Agencia Tributaria se extrae una caída de un 11,5% en las importaciones, que ha llevado a Galicia a tener un saldo positivo en su balanza comercial.

Del último informe de recaudación se deduce la fuerte retracción del consumo interno, ya que "la evolución de septiembre muestra las mismas características que en meses anteriores: la caída de la facturación está provocada por la disminución de las ventas interiores, en tanto que las exportaciones, en términos globales, todavía ofrecen un pequeño crecimiento", que la Agencia Tributaria cifra en el 7,8% para el conjunto de las grandes empresas españolas. Y son las ventas a terceros países, fuera del ámbito de la Unión Europea, las que mejor comportamiento arrojan, con un alza algo superior al 10%.

Sólo en lo que hace referencia a las ventas interiores por sectores, los retrocesos más acusados en septiembre se dejaron sentir en la industria gallega (sin contar energía), cuyas ventas retrocedieron un 6%, hasta los 1.221 millones de euros, mientras que la facturación de la construcción, con unos ingresos de 555,3 millones, cayó un 8,4%. Del total de servicios, cuyos ingresos en su conjunto retrocedieron un 0,5% con respecto al mes anterior, el comercio y la hostelería fueron los más castigados, con una caída en sus ventas interiores del 1,7%, frente a alzas del 4,5% en subsectores como los transportes y las comunicaciones.

Los técnicos de la Agencia Tributaria aclaran que el perfil de las grandes empresas abarca todas las ramas de actividad, aunque su patrón es distinto al general. Son las únicas representantes en actividades como electricidad, refino, construcción de vehículos, naval, transporte aéreo o por ferrocarril, mientras que "no tienen una presencia destacada" en ramas como la construcción, promoción inmobiliaria, hostelería, restauración, transporte por carretera o servicios a terceros.