Soberbia bélica

La soberbia bélica con la que actúan las dos primeras potencias del mundo, Estados Unidos y Rusia, es exasperante. No se puede con ellos. Lo mismo da que da lo mismo que se les explique que son ilegales las guerras que hacen que no. Los muertos que las tropas americanas siguen dejando en Afganistán e Irak ya ni salen en los telediarios; los que dejan las tropas Rusas en Georgia de momento sí, 250 muertos y contando.

En estos rifirrafes a tiros siempre hay petróleo de por medio, ¡qué raro! Y uno se pregunta para qué sirve que se reúnan en petit comité los embajadores y presidentes...

La soberbia bélica con la que actúan las dos primeras potencias del mundo, Estados Unidos y Rusia, es exasperante. No se puede con ellos. Lo mismo da que da lo mismo que se les explique que son ilegales las guerras que hacen que no. Los muertos que las tropas americanas siguen dejando en Afganistán e Irak ya ni salen en los telediarios; los que dejan las tropas Rusas en Georgia de momento sí, 250 muertos y contando.

En estos rifirrafes a tiros siempre hay petróleo de por medio, ¡qué raro! Y uno se pregunta para qué sirve que se reúnan en petit comité los embajadores y presidentes de Estado, o para qué sirve la OTAN, si luego cada país va erre que erre a lo suyo y toma la decisión que más le conviene.

Yo nunca entendí las guerras, como tampoco lo hacen las víctimas que éstas dejan. Decía Simón Bolívar: "De la paz se debe esperar todo, de la guerra nada más que desastre". Para qué decir más.