Austeridad a cámara lenta

Con cuentagotas. Hoy una medida, la semana que viene, otra. En 15 días, otra más. Los anuncios de recortes en el gasto del Gobierno regional se suceden. Pero sin concretarlos. Ni número de afectados, ni ahorro previsto. Primero fue la congelación de sueldos de los altos cargos, medida estrella del "plan de austeridad" de la presidenta Esperanza Aguirre.

¿Cuántos altos cargos exactamente? ¿A cuánto asciende el ahorro? No hubo respuesta. Cuando dio a conocer la medida, el 19 de junio, Aguirre prometió dar detalles la semana siguiente.

No pudo ser. Había otro frente abierto: la cris...

Con cuentagotas. Hoy una medida, la semana que viene, otra. En 15 días, otra más. Los anuncios de recortes en el gasto del Gobierno regional se suceden. Pero sin concretarlos. Ni número de afectados, ni ahorro previsto. Primero fue la congelación de sueldos de los altos cargos, medida estrella del "plan de austeridad" de la presidenta Esperanza Aguirre.

¿Cuántos altos cargos exactamente? ¿A cuánto asciende el ahorro? No hubo respuesta. Cuando dio a conocer la medida, el 19 de junio, Aguirre prometió dar detalles la semana siguiente.

No pudo ser. Había otro frente abierto: la crisis de Gobierno que se saldó con la supresión de tres consejerías (Hacienda, Vivienda y Justicia, que se integraron en otras ya existentes) y la salida de los consejeros marianistas Alfredo Prada y Manuel Lamela. Más ahorro, aseguró Aguirre. Pero tampoco especificó cuánto. "No lo puedo cifrar", admitió, pese a asegurar que el "adelgazamiento" no se iba a limitar al consejero, sino que iría "hacia abajo".

Ayer mismo, casi un mes después del anuncio, se dio a conocer la última medida. El Consejo de Gobierno aprobó un "primer paquete" de reestructuraciones. Se eliminan seis direcciones generales, una ínfima parte de los 160 altos cargos del Gobierno regional. Y a esta supresión seguirá "toda la estructura asociada a esas direcciones generales", aseguró el vicepresidente, Ignacio González, y también "la eliminación de empresas y organismos" vinculados a ellas. Pero, una vez más, no hubo cuantificación del ahorro. Cada director general cobra, según los Presupuestos de este año, 90.184 euros. Y, como estamos en julio, ya se han embolsado más de la mitad. Las partidas que el presupuesto destina a pagar a altos cargos son de 15,5 millones.

La supresión de direcciones generales resulta de fusionar las ya existentes. La medida afecta a la consejería de Presidencia, Justicia e Interior y a la de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio. Ambas resultaron, a su vez, de la fusión que se produjo tras la crisis de Gobierno. Además, la Dirección General de Agricultura, que hasta ahora dependía de Economía y Hacienda, se incorpora a Medio Ambiente. El primer efecto ha sido la destitución de los seis directores, que se publicará, junto con los nombramientos, el lunes en el boletín oficial.