Aguirre se suma al frente del agua de Camps contra Zapatero

Los presidentes autonómicos se reúnen en medio de la bronca interna del PP

La presidenta de la Comunidad de Madrid, la popular Esperanza Aguirre, se sumó ayer a la tesis del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, en materia de agua. Una tesis, basada en reivindicación del derogado trasvase del Ebro, que se ha convertido en el principal motivo de crítica contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Aguirre y Camps se reunieron en Madrid ayer, acompañados de los consejeros de Economía, Infraestructuras, Medio Ambiente y Gobernación, para coordinar en la medida de lo posible sus reivindicaciones frente al Gobierno de Zapatero.

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La presidenta de la Comunidad de Madrid, la popular Esperanza Aguirre, se sumó ayer a la tesis del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, en materia de agua. Una tesis, basada en reivindicación del derogado trasvase del Ebro, que se ha convertido en el principal motivo de crítica contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Aguirre y Camps se reunieron en Madrid ayer, acompañados de los consejeros de Economía, Infraestructuras, Medio Ambiente y Gobernación, para coordinar en la medida de lo posible sus reivindicaciones frente al Gobierno de Zapatero.

Tanto Camps como Aguirre hicieron esfuerzos por centrar la atención en los acuerdos alcanzados, aunque la expectación de la mayor parte de los medios de comunicación estuvo centrada en la grave crisis que atraviesa el PP.

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Aguirre aseguró que la Comunidad de Madrid apoya el trasvase de agua a Barcelona y que la paralización del trasvase del Ebro afecta a su región "de manera indirecta pero muy profunda, porque los pantanos de cabecera del Tajo, Entrepeñas y Buendía, tienen que dar el agua a Levante, aunque lo hacen por solidaridad y porque deben hacerlo".

Más incisivo estuvo el presidente de la Generalitat, que horas antes de que el PP lleve a las Cortes Valencianas el debate del agua, acusó al presidente del Gobierno de mentir, al menos, en tres ocasiones. "Zapatero ha mentido de forma escandalosa a todos los españoles", prosiguió Camps, "hace cuatro años dijo que habría alternativa al trasvase del Ebro, y se ha demostrado que no es así en el momento en el que Barcelona ha pedido agua para beber". La segunda mentira, según Camps, fue que dijo "que tenía solucionados los problemas de agua en las cuencas por donde pasa el Ebro y no ha hecho la inversión en infraestructuras de regadío". La tercera "falacia" es decir que el agua que reclama la Generalitat valenciana es para los campos de golf, ya que "las familias claman por tener agua para regar y el que diga otra cosa está mintiendo de forma descarada".

El jefe del Consell dio por hecho que el PP llevará una propuesta para recuperar el trasvase del Ebro al Congreso de los Diputados y que la votará el presidente de la Cámara, José Bono.Tras su reunión con Aguirre, Camps destacó que "hará movilizaciones de todo tipo y donde haga falta", como recurrir al Tribunal Constitucional y explicar en la Unión Europea que la ex ministra de Medio Ambiente Cristina Narbona mintió al renunciar a obtener financiación para el trasvase del Ebro porque la política de agua iba a cambiar.

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Mientras Camps insistía en su reivindicación hídrica, la Ejecutiva del PSOE, reunida ayer, expresó su respaldo al trasvase de urgencia a Barcelona y estableció los argumentos para unificar su posición en los distintos territorios y rebatir lo que, en su opinión, es "una arenga catastrofista" del PP.

Además de las cuestiones hídricas, Camps y Aguirre acordaron reclamar una entrevista conjunta a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, para protestar por lo que consideran un retraso en la construcción del AVE Madrid-Comunidad Valenciana, reclamar el reforzamiento del transporte de mercancías entre las dos capitales y exigir que el Gobierno impulse una nueva autopista de pago paralela a la A-3 entre las dos ciudades. Camps se quejó de que la semana pasada, tras la final de la Copa del Rey entre el Valencia y el Getafe en el campo Vicente Calderón, tuvo que soportar un tráfico denso y lento de vuelta a casa.

En la reunión, tanto Aguirre como Camps reclamaron un mayor número de agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil y que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero les suba el sueldo hasta equipararlos a las policías autonómicas de Cataluña y el País Vasco. Así, Aguirre reclamó 4.000 agentes más para Madrid y Camps 3.000 más. El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Antoni Bernabé, ironizó sobre las exigencias del presidente de la Generalitat y dijo que sus peticiones siempre llegan tarde. "Primero pidió 1.000 agentes, después 1.500, más tarde 2.000, luego 2.200 y ahora 3.000", indicó Bernabé.

Además de estas cuestiones, los dos presidentes autonómicos del PP exigieron una revisión "urgente" por parte del Gobierno del sistema de financiación autonómica, en el que se reconozca el incremento de población. "El superávit de las cuentas del Estado se soporta sobre la tensión presupuestaria a la que tiene sometido el Gobierno a las comunidades autónomas", sentenció Camps.

Por otra parte, el grupo parlamentario de Compromís anunció en Alzira que hoy propondrá en las Cortes Valencianas un consenso en materia hídrica en el que participen las formaciones políticas junto a las organizaciones cívicas, empresariales y sociales con el fin de resolver la problemática del agua, informa Xavier España. El portavoz adjunto de Compromís y líder del Bloc, Enric Morera, tiene previsto denunciar el pacto del agua que en el año 1998 firmaron el manchego José Bono y Eduardo Zaplana y que permitió "robar 430 hectómetros cúbicos de los derechos de nuestros agricultores en beneficio de los latifundios de la Mancha Oriental".

Aguirre y Camps, ayer, tras la reunión, se dirigen a los periodistas.EFE

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