EA prevé una "confrontación institucional" si no hay consulta

Eusko Alkartasuna apela en su ponencia política a la "confrontación institucional" y a la "resistencia cívica" en el caso "previsible" de que el Gobierno español se oponga a la consulta, dando un "portazo" similar a recibido por el plan Ibarretxe el 1 de febrero de 2005. "No nos gustaría, pero nos tememos que en los próximos tiempos este país va a tener una confrontación institucional clara con aquellos que niegan el principio democrático a la decisión", apuntó ayer la presidenta de EA, Begoña Errazti, durante la presentación de la ponencia política que se debatirá en el congreso de dic...

Eusko Alkartasuna apela en su ponencia política a la "confrontación institucional" y a la "resistencia cívica" en el caso "previsible" de que el Gobierno español se oponga a la consulta, dando un "portazo" similar a recibido por el plan Ibarretxe el 1 de febrero de 2005. "No nos gustaría, pero nos tememos que en los próximos tiempos este país va a tener una confrontación institucional clara con aquellos que niegan el principio democrático a la decisión", apuntó ayer la presidenta de EA, Begoña Errazti, durante la presentación de la ponencia política que se debatirá en el congreso de diciembre.

Errazti reconoció que la "hipótesis más previsible" en estos momentos es que el Ejecutivo central rechace la propuesta del lehendakari Ibarretxe, ante lo que ha propuesto, como avanzó Carlos Garaikoetxea, acudir a otros países de la UE de mayor "tradición democrática" que España para que avalen este proceso. Y también impulsar "leyes concretas" desde Euskadi en contra de las "imposiciones del Estado" y para "superar el Estatuto de Gernika".

Pese a que aún no ha aclarado si se presentará a la reelección, Errazti fue ayer la encargada de presentar públicamente la ponencia política que será llevado ahora a las organizaciones locales para que lo estudien y presenten las enmiendas que consideren necesarias. EA celebrará su Congreso Nacional el próximo 15 de diciembre.

La ponencia recuerda el "portazo político" recibido por el plan Ibarretxe y apunta que aquel rechazo "demostró clarísimamente la necesidad de preguntar a la sociedad vasca qué es lo que desea". También se opone a la "transversalidad" si equivale a "veto".