Empleo declara ilegal el cierre patronal de Druckguss en una huelga

El Departamento de Empleo del Gobierno vasco ha emplazado a la empresa Druckguss Iberica, que se dedica a la fabricación de piezas de aluminio inyectado, a "reabrir las instalaciones" que tiene en Igorre (Vizcaya) y que ha cerrado en el transcurso de una huelga.

Los 54 trabajadores que forman la plantilla elaboraron un calendario de paros que iba a desembocar en una huelga indefinida a partir del próximo día 8. La plantilla demanda subidas salariales del 3,6% y del 3,2% para los años 2005 y 2006, y un incremento salarial lineal de 1.200 euros para este año. Los empleados llevan desde 20...

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El Departamento de Empleo del Gobierno vasco ha emplazado a la empresa Druckguss Iberica, que se dedica a la fabricación de piezas de aluminio inyectado, a "reabrir las instalaciones" que tiene en Igorre (Vizcaya) y que ha cerrado en el transcurso de una huelga.

Los 54 trabajadores que forman la plantilla elaboraron un calendario de paros que iba a desembocar en una huelga indefinida a partir del próximo día 8. La plantilla demanda subidas salariales del 3,6% y del 3,2% para los años 2005 y 2006, y un incremento salarial lineal de 1.200 euros para este año. Los empleados llevan desde 2005 sin tener una mejora de sus condiciones laborales.

El Gobierno considera que el cierre patronal de la empresa Druckguss Iberica "no se ajusta a la ley", por lo que próximamente comunicará de manera oficial a su dirección que "desista en su actitud y reabra las instalaciones que la empresa tiene en Igorre, Vizcaya". Los sindicatos denunciaron que la empresa ya ha comenzado a desmantelar las instalaciones. Al parecer, varios mandos de la firma accedieron los pasados 28 y 29 de septiembre a las instalaciones, llevándose moldes y maquinaria en varios camiones, lo que ha paralizado la actividad productiva.

Además, los sindicatos han denunciado que, durante el cierre patronal decretado por la firma, varios trabajadores pudieron acceder a las instalaciones. El comité de empresa está compuesto por dos delegados de LAB, uno de ELA y dos independientes.

ELA exigió ayer a la dirección de la firma la reapertura de la empresa, porque "está cometiendo un delito" con su cierre, y anunció que "tomará medidas legales contra la empresa y sus representantes".

Además, el sindicato instó a las instituciones a "actuar con todos los medios para obligar a la empresa a cumplir con sus obligaciones legales de apertura de instalaciones y mantenimiento de la maquinaria y moldes de producción".

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