Ese haz de rayas me suena de algo
Un internauta denuncia el "posible plagio" de uno de los logos finalistas
¿Plagio o coincidencia? La pregunta, que parece dar la razón a los que critican este concurso popular y abierto, la tienen que responder los responsables de Madrid 2016. Confiaban, para garantizar la originalidad de los logos, en la cultura visual de los expertos y en la integridad de los concursantes. Ninguna es infalible.
La denuncia del "posible plagio" la hizo ayer Juan Luis Gómez Pena, un diseñador de 24 años que usa el alias de Causual, en Fresqui.com, una web de noticias creadas por lectores o recomendadas por ellos. Gómez conoce a la perfección todos los diseños candidato...
¿Plagio o coincidencia? La pregunta, que parece dar la razón a los que critican este concurso popular y abierto, la tienen que responder los responsables de Madrid 2016. Confiaban, para garantizar la originalidad de los logos, en la cultura visual de los expertos y en la integridad de los concursantes. Ninguna es infalible.
La denuncia del "posible plagio" la hizo ayer Juan Luis Gómez Pena, un diseñador de 24 años que usa el alias de Causual, en Fresqui.com, una web de noticias creadas por lectores o recomendadas por ellos. Gómez conoce a la perfección todos los diseños candidatos ya que se presentó a la primera criba, de forma individual y en grupo, pero no fue seleccionado. "Estaba consultando para un trabajo Web design: studios 2, de Taschen, cuando lo vi". Y le sonaba de algo. En unos segundos cayó en la cuenta.
En su opinión, el logo Madrid Fluye, de Graciela Cancio, se parece de forma "asombrosa" a una web diseñada en 2006 por el italiano Libero Cavinato para Augusto Valenti, un diseñador de gafas. El libro, una biblia del diseño web, recoge los mejores y más actuales trabajos y se puede adquirir hasta en el Vip's.
Soledad Hernández de la Rosa, diseñadora y presidenta de la Asociación Española de Profesionales del Diseño, advertía sin conocer este caso, del riesgo que entrañan estos concursos. "En estas convocatorias abiertas a la población hay más probabilidades de que las propuestas respondan a recursos gráficos existentes en el inconsciente colectivo y que coincidan con patrones hechos. Al final el resultado será un algo que se parece a algo que ya hemos visto", explicaba. "Nuestro trabajo tiene reglas internas, como en cualquier profesión, y no todo el mundo tiene el conocimiento suficiente y criterio para elegir más allá del gusto personal", añadía.
El caso es que el logo puesto en cuestión es, como la imagen corporativa de la empresa italiana, un haz de rayas de colores. Su autora, que tiene 22 años y estudia diseño, se confiesa destrozada por la acusación, que tilda de "absolutamente falsa". Graciela Cancio niega con "total rotundidad" haber copiado a Cavinato o haberse inspirado en él, ya que "ni siquiera conocía" la página italiana. "Admito el parecido, pero te aseguro que me he quedado blanca cuando lo he visto", explica la joven, que añade que tiene "la conciencia muy limpia" porque su diseño es obra sólo suya.
"Esta acusación me perjudica mucho, ganar ya sería imposible", se lamenta, abatida. Cancio se defiende argumentando que su dibujo es "un elemento morfológico simple" y que presentó otra versión en vertical "que no se parece nada". Revela, que lo ideó pensando en el Metro y que a todos les han sacado "un parecido, uno que es similar a la eme de Movistar, otro a la Expo de Sevilla...".
Desde Madrid 2016 se admite que "el parecido es razonable", aunque conceden a su autora "el beneficio de la duda". La candidatura investiga la denuncia. En caso de ser cierta, "se descalificaría" y pasarían a ser nueve los contendientes.