Elche augura un inicio de curso caótico y reclama más centros

"El próximo curso puede ser caótico si siguen sin habilitarse las infraestructuras necesarias", advierte desde hace meses la concejala de Educación del Ayuntamiento de Elche, Blanca González. Los peores presagios se han cumplido y la concejal aseguró hace unos días que este año muchos estudiantes volverán a padecer los problemas de hacinamiento del año pasado al no construirse los centros previstos, dos colegios y un instituto.

Uno de los centros que debería haberse construido es el colegio Clara Campoamor. El Ayuntamiento cedió los terrenos para esta infraestructura hace tres años. Otr...

"El próximo curso puede ser caótico si siguen sin habilitarse las infraestructuras necesarias", advierte desde hace meses la concejala de Educación del Ayuntamiento de Elche, Blanca González. Los peores presagios se han cumplido y la concejal aseguró hace unos días que este año muchos estudiantes volverán a padecer los problemas de hacinamiento del año pasado al no construirse los centros previstos, dos colegios y un instituto.

Uno de los centros que debería haberse construido es el colegio Clara Campoamor. El Ayuntamiento cedió los terrenos para esta infraestructura hace tres años. Otra obra pendiente es el colegio Mestre Canaletas de la pedanía ilicitana de Perleta, pendiente de derribo y de nueva construcción. Los alumnos de este centro ocuparán este curso un antiguo colegio en desuso, habilitado para la ocasión.

Un total de 21.000 niños empezarán el viernes las clases en Elche, 7.000 de Educación Infantil y 14.000 de Primaria. Las plazas se han cubierto casi en su totalidad, y quedan 66 menores sin escolarizar. Son niños que van llegando a lo largo del año con sus familias inmigrantes y que solicitan plaza fuera del periodo ordinario. La concejala de Educación asegura que todos son escolarizados, "pero la falta de espacio crónica que sufrimos hace años nos dificulta cada vez más la tarea".

El curso pasado, estudiantes de algunos colegios dieron clase en aulas de 35 metros y para ir al baño atravesaban otra clase o debían apartar el pupitre para abrir la puerta. Y un grupo de 225 niños de entre tres y cinco años, del barrio de Altabíx, tuvo que desplazarse cada día en autobús al otro extremo de Elche a unas aulas provisionales por el retraso del colegio Clara Campoamor. Este curso harán lo mismo. "En la consejería nos dicen que el colegio está en la fase de redacción del proyecto" dice incrédula la concejala.