Una juez otorga a una lesbiana un régimen de visitas al hijo que tuvo su ex pareja

La magistrada considera que las dos mujeres son "progenitoras" del niño

Un Juzgado de Sevilla ha concedido a una mujer un régimen de visitas para que pueda seguir viendo al hijo biológico de su ex compañera. La juez María Núñez, titular del Juzgado de Familia 17 de Sevilla, considera que el menor, que hoy tiene cinco años, es "fruto" de la relación que mantuvieron ambas mujeres durante 11 años, por lo que entiende que la demandante, María Dolores C., es "progenitora" del niño y tiene derecho a un régimen de visitas compartido. La sentencia es recurrible, pero la juez ha estipulado que el posible recurso no interrumpa el régimen de visitas.

La sentencia va m...

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Un Juzgado de Sevilla ha concedido a una mujer un régimen de visitas para que pueda seguir viendo al hijo biológico de su ex compañera. La juez María Núñez, titular del Juzgado de Familia 17 de Sevilla, considera que el menor, que hoy tiene cinco años, es "fruto" de la relación que mantuvieron ambas mujeres durante 11 años, por lo que entiende que la demandante, María Dolores C., es "progenitora" del niño y tiene derecho a un régimen de visitas compartido. La sentencia es recurrible, pero la juez ha estipulado que el posible recurso no interrumpa el régimen de visitas.

María Dolores pedirá pagar una pensión alimenticia a la madre biológica del menor
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La sentencia va más allá de la solicitud de María Dolores, que en su demanda pedía que le concedieran el estatus de "allegada" al menor, como se considera a los abuelos, tíos y otros familiares. "En nuestro alegato al final del juicio le dije a la juez que, a la vista de las pruebas, nos habíamos quedado cortos al pedir un régimen tan light", reconocía ayer el abogado de la demandante, Manuel Parrilla. La magistrada le ha dado la razón: "En la demanda se solicita un régimen de visitas considerando a María Dolores allegada, pero es más que eso, es progenitora", recoge la sentencia.

La juez da por probado que María Dolores y Mercedes convivieron durante años, se compraron un piso juntas y decidieron que una de ellas se sometiera a una inseminación artificial para tener un hijo. Acordaron que fuera Mercedes porque tenía mejor salud. Durante la vista, que se celebró el cuatro de julio, María Dolores y su letrado mostraron videos de la vida en común antes y después de que naciera el menor, la escritura de la casa que compraron y una carta de despedida que Mercedes escribió a María Dolores en la que hablaba del hijo como "lo más importante" que le había dado en los 11 años de relación.

La juez ha tomado también en consideración el testimonio de amigas de la pareja y las fotografías que aportó María Dolores para acreditar que ambas ejercieron como progenitoras hasta que se separaron y la madre biológica apartó al menor de su ex pareja. Las pruebas son contundentes, según la juez: "Fueron una familia con convivencia de los progenitores y siguen siendo una familia aun cuando ellas vivan separadas, porque tienen un hijo en común", sostiene el fallo.

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La ley que equipara el matrimonio homosexual al heterosexual, incluido el derecho a adoptar, entró en vigor en junio de 2005, pero para entonces, María Dolores y Mercedes ya había roto su relación. Sin embargo, la juez considera que la relación era tan estable y la decisión de tener un hijo fue tan consensuada, que, si la ley hubiera estado vigente cuando nació el niño, ambas mujeres habrían decidido que María Dolores lo adoptara.

El menor, según la sentencia, "es hijo de esta pareja, una pareja que buscó el embarazo de la única manera que podía hacerlo, mediante inseminación artificial de una de las progenitoras, que criaron al niño como hijo y que han respetado esta relación hasta que, como siempre ocurre, litigios sobre otras cuestiones materiales, en este caso la vivienda, vienen a mezclarse y a enturbiar las relaciones afectivas personales".

No es la única vez que la juez critica la actitud de la madre biológica por permitir que la ruptura de la pareja afectase al menor: "Cuesta trabajo constatar y admitir que personas tan valientes, tan consecuentes consigo mismas [...] no sepan afrontar una situación de crisis de pareja y al final, como todos, como las parejas heterosexuales, confundan hijos con viviendas, amor y respeto con bienes materiales, perjudicando lo más importante, un niño que no pidió venir al mundo".

María Dolores, la madre no biológica, conoció la resolución judicial a mediodía de ayer y no se la creía. "Me he ido del trabajo corriendo, estoy contentísima", aseguró por teléfono. Las últimas veces que ha visto al crío ha sido desde las gradas de las clases de natación o de lejos a la salida del colegio. Ahora lo tendrá con ella un fin de semana de cada dos y la mitad de las vacaciones escolares. La juez ha ordenado que el régimen de visitas entre en vigor en agosto y María Dolores planea llevarse al niño a la playa. Antes, su abogado solicitará que su representada pague una pensión alimenticia. "Hay que ser coherentes y si le consideran progenitora quiere que sea con todas las consecuencias".

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