"Cada día estudio dos horas y el fin de semana, cuatro"

"No fumo, no bebo, sólo coca-cola, aunque salgo por ahí con amigos. No suelo ir a discotecas, pero no es negativo hacerlo. A las dos de la madrugada, como máximo, tengo que estar de vuelta en casa". Berta Cusó, de 17 años, no deja de sonreír en su casa del barrio de Gràcia de Barcelona. Ha sacado un 9,69 en la Selectividad en Cataluña, la mejor nota de los casi 25.000 alumnos que se han presentado a las pruebas para entrar en la Universidad. Estudiará Arquitectura en la Universidad Politécnica de Cataluña.

Berta es catalanohablante. Estudió la Primaria en el colegio público Reina...

"No fumo, no bebo, sólo coca-cola, aunque salgo por ahí con amigos. No suelo ir a discotecas, pero no es negativo hacerlo. A las dos de la madrugada, como máximo, tengo que estar de vuelta en casa". Berta Cusó, de 17 años, no deja de sonreír en su casa del barrio de Gràcia de Barcelona. Ha sacado un 9,69 en la Selectividad en Cataluña, la mejor nota de los casi 25.000 alumnos que se han presentado a las pruebas para entrar en la Universidad. Estudiará Arquitectura en la Universidad Politécnica de Cataluña.

Berta es catalanohablante. Estudió la Primaria en el colegio público Reina Violant, de Gràcia, y Secundaria y Bachillerato en el colegio concertado Súnion. Además de las clases, estudia todos los días entre dos y dos horas y media. Los sábados, cuatro, y los domingos otras cuatro, dice. Pero no se siente una empollona, aunque en su expediente todo son sobresalientes y algún notable.

Con la nota que ha sacado no tendrá problemas para entrar en Arquitectura, que le gusta, explica: "Porque es creativa y porque tiene matemáticas y dibujo, que me van bastante".

Quizá porque en su casa hay libros -su madre es maestra y su padre, actor de teatro- siempre ha leído. Sostiene Pereira, de Antonio Tabucchi, y El libro de las ilusiones, de Paul Auster, es lo último que ha leído. En música ha aprendido de los discos de su padre, Joan, ayer muy feliz a su lado. "Me encanta escuchar a Leonard Cohen y a Damien Rice, dice con el asentimiento orgulloso de su padre.

"Me preocupa que la gente joven tenemos un poco de mala fama como si todo fuera alcohol, drogas y cosas así, cuando no es verdad para la mayoría". En su cuarto enseña cómo se relaja cuando se hace ella misma los collares que luce. "En la vida hay subidas y bajadas. Es imposible estar siempre mal o bien, pero cuando estoy mal quizá me cierro bastante", suelta antes de despedirse.