"Todavía tenemos agua"
El debate del agua no podía faltar en este congreso. El auditorio esperaba la reivindicación del trasvase del Ebro por parte del vicepresidente del Consell, Víctor Campos, y anotó una vez más la "obligación moral y política" del PP de reclamarlo al Gobierno, pero acogió con algunos murmullos el optimismo del dirigente popular sobre la modernización del regadío. Campos aseguró que ya hay "180.000 hectáreas modernizadas por los proyectos en marcha o ya modernizadas por riego localizado, lo que supone cerca del 70% de la superficie de regadío colectivo, mientras la media nacional no supera el 10%...
El debate del agua no podía faltar en este congreso. El auditorio esperaba la reivindicación del trasvase del Ebro por parte del vicepresidente del Consell, Víctor Campos, y anotó una vez más la "obligación moral y política" del PP de reclamarlo al Gobierno, pero acogió con algunos murmullos el optimismo del dirigente popular sobre la modernización del regadío. Campos aseguró que ya hay "180.000 hectáreas modernizadas por los proyectos en marcha o ya modernizadas por riego localizado, lo que supone cerca del 70% de la superficie de regadío colectivo, mientras la media nacional no supera el 10%". El vicepresidente vaticinó para el final de la década el 100%.
La ministra de Agricultura, Elena Espinosa, señaló que no era ni el día ni el momento de decirle a Campos "que repase los datos", pero lo dijo. No coinciden con los del ministerio, abundó Espinosa, comentario que mereció aplausos. Según la ministra, Murcia es más eficiente en el regadío y Aragón pierde menos agua que la Comunidad Valenciana. Espinosa destacó la importancia de un consumo racional del agua y cifró en 170 millones de euros la inversión del Gobierno en la modernización del regadío valenciano, a lo que se sumará un ahorro de 140 hectómetros cúbicos anuales con nuevas actuaciones por 450 millones en todo el Estado. Las críticas cruzadas de populares y socialistas en torno al agua no pasaron de ahí hasta que Espinosa tosió un par de veces y Campos, caballeroso, le acercó al atril un vaso de agua. La ministra aprovechó la ocasión para lanzar el dardo con ironía. "Todavía tenemos agua", dijo.
La responsable de Agricultura abordó también otra de las grandes preocupaciones de la agricultura valenciana destacada por Brusca, la reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) de frutas y hortalizas y de la del vino, que representan el 65% de la producción final agraria. La propuesta de la Comisión Europea, aún por cerrar, se presenta "conflictiva" para los cítricos y productos transformados porque aboga por ayudas a la hectárea en vez de la producción, un planteamiento que Agricultura no ve "adeucado", por lo que estudia respuestas al sector compatibles con la OCM mediante contratos con la industria que den garantías al productor y mantengan la calidad. Campos prometió el apoyo a una postura de firmeza contra la actual propuesta de reforma.