Los Mossos inician el despliegue en 27 municipios del Baix Llobregat y el Vallès

Un total de 1.477 agentes de los Mossos d'Esquadra son a partir de hoy los encargados de garantizar la seguridad en el Vallès Occidental y en parte del Baix Llobregat. La policía autonómica sustituye así al Cuerpo Nacional de Polícía en 27 municipios del área metropolitana de Barcelona, en los que viven más de un millón de personas. El despliegue ha supuesto la construcción de 12 nuevas comisarías, aunque dos de ellas -las de Sabadell y El Prat- no estarán acabadas hasta el año que viene. Desde hoy, los Mossos controlan tres cuartas partes del territorio catalán.

Cuando se cumple un año...

Un total de 1.477 agentes de los Mossos d'Esquadra son a partir de hoy los encargados de garantizar la seguridad en el Vallès Occidental y en parte del Baix Llobregat. La policía autonómica sustituye así al Cuerpo Nacional de Polícía en 27 municipios del área metropolitana de Barcelona, en los que viven más de un millón de personas. El despliegue ha supuesto la construcción de 12 nuevas comisarías, aunque dos de ellas -las de Sabadell y El Prat- no estarán acabadas hasta el año que viene. Desde hoy, los Mossos controlan tres cuartas partes del territorio catalán.

Cuando se cumple un año exacto del ansiado aterrizaje en la ciudad de Barcelona, los Mossos d'Esquadra dan hoy un paso más en su expansión por el territorio catalán. Hace 12 años se inició el despliegue en la comarca de Osona. Hoy, el 80% de la población está ya bajo control de la policía autonómica. El año próximo se completará la implantación en el Baix Llobregat -Sant Feliu, Sant Boi, Gavà y Martorell- y en las comarcas del Alt Penedès, el Garraf y el Baix Penedès.

En 2008 finalizará el despliegue y los Mossos asumirán la seguridad ciudadana en las comarcas de Tarragona, ahora en manos del Cuerpo Nacional de Policía (en núcleos urbanos) y de la Guardia Civil (en zonas rurales). Para entonces está previsto que la plantilla pase de los 11.800 agentes que tiene actualmente a más de 18.200.

Igual que en el caso de Barcelona, uno de los objetivos centrales es conseguir una mayor colaboración con la ciudadanía. O sea, que el modelo es la llamada policía de proximidad, atenta a las demandas y preocupaciones del territorio. Por ejemplo, los pequeños hurtos o los delincuentes multirreincidentes. Para ello será básico el concurso de las policías locales de cada uno de los 27 municipios, con los que ya se han firmado convenios de colaboración.

Doce comisarías

Los 1.477 policías destinados al Baix Llobregat y el Vallès Occidental -o sea, uno por cada 698 habitantes- trabajarán en 12 nuevas comisarías: 7 ABP (área básica policial o comisaría principal) y 5 comisarías de distrito. Los agentes se servirán de 340 nuevos vehículos policiales y sustituirán en tareas de seguridad ciudadana y orden público al Cuerpo Nacional de Policía, que en Cataluña mantendrá 3.800 agentes.

El despliegue que hoy comienza en el Baix Llobregat será parcial. Los 435 agentes destinados a la comarca velarán por mantener el orden público en los populosos municipios de Cornellà, El Prat, Esplugues -cada uno de ellos, con comisaría propia- y Sant Just Desvern. Aquí se esperaba su llegada, ya que los efectivos del Cuerpo Nacional de Policía se quedaron bajo mínimos y, debido a su poca presencia en la calle, existía cierta sensación de inseguridad.

El objetivo es aprovechar la experiencia acumulada en L'Hospitalet, donde la policía autonómica trabaja desde 2003. El nuevo jefe de la Región Policial Metropolitana Sur, intendente Ferran López, explica que el modelo implantado en la segunda ciudad de Cataluña "ha funcionado muy bien en un ámbito urbano y se puede extender a los otros municipios". López aseguró que la colaboración con el Cuerpo Nacional de Policía ha sido "positiva" y se mantendrá en los primeros días del despliegue.

El intendente explicó que los mossos han trabajado desde febrero en estudiar los problemas delictivos de la zona para llegar al día de hoy con ciertas garantías. "Lo que demanda la ciudadanía es que recuperemos el espacio público", señaló. Por el momento, los agentes tendrán que lidiar con la pequeña delincuencia y poner coto, por ejemplo, a la situación conflictiva que se vive en el barrio de Sant Cosme, en El Prat. Si bien la situación está normalizada en la mayor parte de la zona, aún queda un pequeño reducto donde continúa existiendo compra-venta de droga.

Precisamente la comisaría de El Prat no estará terminada hasta el primer trimestre del año próximo debido a las obras de la línea 9 del metro. Los agentes deberán trabajar en dependencias provisionales. Además de los cuatro municipios del Baix Llobregat, los Mossos d'Esquadra asumirán el control de la seguridad en el aeropuerto de Barcelona. Para facilitar el trabajo, la terminal A de El Prat acogerá una oficina de denuncias, informa Glòria Ayuso.

Maragall, en Sabadell

Con unos 815.000 habitantes, el Vallès Occidental contará con 1.042 policías. La sede central se encontrará en Sabadell, aunque aún no estará terminada hasta el primer trimestre del próximo año. Pasqual Maragall se reunió ayer precisamente en esta comisaría (conocida como Edificio Egara) con los alcaldes de ambas comarcas y los responsables policiales en su último acto como presidente de la Generalitat antes de las elecciones, informa Sílvia Marimon.

A Maragall le acompañó la consejera de Interior, Montserrat Tura, quien destacó que el despliegue en el Vallès Occidental y el Baix Llobregat "ha sido tan o más complejo el de Barcelona ciudad, por lo difícil del territorio. Además, el calendario ha sido muy apretado". La consejera dibujó un balance positivo del primer año de funcionamiento de la policía autonómica en la capital catalana: "Hemos cumplido con el objetivo de tener una comisaría en cada distrito, y ha habido una contención de la delincuencia".