Las lluvias provocan una plaga de grillos en el entorno de Sevilla
La quietud de agosto en Sevilla sólo podía verse alterada por algo tan surrealista como una plaga de grillos. Desde la tromba de agua que cayó la pasada semana, las perfectas condiciones de humedad y calor han llenado el entorno de la capital andaluza de miles de estos insectos. Otros municipios como Gelves, San Juan de Aznalfarache, Camas, Mairena y Tomares también han sufrido su molesta presencia.
Las reacciones durante estos días han ido desde la pura indiferencia hasta el ataque de pánico. Un vecino del barrio sevillano de El Porvenir asegura que tiene el patio inundado de grillos d...
La quietud de agosto en Sevilla sólo podía verse alterada por algo tan surrealista como una plaga de grillos. Desde la tromba de agua que cayó la pasada semana, las perfectas condiciones de humedad y calor han llenado el entorno de la capital andaluza de miles de estos insectos. Otros municipios como Gelves, San Juan de Aznalfarache, Camas, Mairena y Tomares también han sufrido su molesta presencia.
Las reacciones durante estos días han ido desde la pura indiferencia hasta el ataque de pánico. Un vecino del barrio sevillano de El Porvenir asegura que tiene el patio inundado de grillos desde el fin de semana y que el ruido es tan ensordecedor que no duerme ni con las ventanas cerradas. Otros testimonios son más inquietantes: un comensal vio ante sus ojos, mientras cenaba al aire libre, cómo cientos de grillos caían de los árboles a su plato como un racimo de uvas.
Pero más allá del susto, esta plaga de resonancias bíblicas no tiene ninguna incidencia sanitaria, según el Ayuntamiento. La bióloga María Ángeles Pacheco, del Laboratorio municipal de Sevilla, lo explica así: "Los grillos no son dañinos en ningún caso, no transmiten ninguna enfermedad. Acuden a las casas atraídos por el brillo de la luz y porque están más resguardados de los depredadores".
¿Y ahora? "En cuanto vuelvan las altas temperaturas y desaparezca la humedad, los grillos irán desapareciendo", explica Pacheco. "Las precipitaciones de la última semana [casi 40 litros por metro cuadrado el jueves pasado] fueron extraordinarias, idóneas para la reproducción".
Es difícil saber de dónde han venido los grillos, pero si se tiene en cuenta que cada hembra puede incubar entre 500 y 1.000 huevos de una sola vez, la respuesta no parece muy escondida.
El que quiera librarse de la presencia de estos insectos tiene dos posibilidades. La más expeditiva, si no se tiene la paciencia para esperar a que vuelva el asfixiante calor, es llamar a una empresa de fumigación. La empresa Fumisur, sin embargo, recomienda medidas preventivas como tirar la basura todos los días y cerrar bien las puertas o ventanas exteriores
La otra posibilidad es hacer caso a la sugerencia de María Ángeles Pacheco: "Algo bueno tiene esta plaga. El grillo es uno de los cebos naturales más apreciados y buscados por los pescadores". Ya saben.