La Guardia Urbana usa ordenadores de bolsillo para imponer multas
Los nuevos utensilios reducen la posibilidad de error en las denuncias
El papel y el bolígrafo están en franca retirada ante el irresistible avance de lo digital. Lo confirmó ayer la Guardia Urbana de Barcelona, que desde ahora utilizará ordenadores de bolsillo (las llamadas PDA's) para tramitar las multas de tráfico y las administrativas. La Policía Local se ha dotado de 330 de estos aparatos, que ofrecen dos grandes ventajas: agilizan el proceso burocrático y minimizan las posibilidades de que el agente introduzca algún dato erróneo en la denuncia.
Los más de 2.500 agentes que integran la Guardia Urbana de Barcelona están acostumbrados a poner denuncias ...
El papel y el bolígrafo están en franca retirada ante el irresistible avance de lo digital. Lo confirmó ayer la Guardia Urbana de Barcelona, que desde ahora utilizará ordenadores de bolsillo (las llamadas PDA's) para tramitar las multas de tráfico y las administrativas. La Policía Local se ha dotado de 330 de estos aparatos, que ofrecen dos grandes ventajas: agilizan el proceso burocrático y minimizan las posibilidades de que el agente introduzca algún dato erróneo en la denuncia.
Los más de 2.500 agentes que integran la Guardia Urbana de Barcelona están acostumbrados a poner denuncias a los ciudadanos. Unas, por haber cometido una infracción de tráfico; otras, por haber incumplido tal o cual ordenanza municipal. Pero a veces, los policías -que también son humanos- se equivocan. Confusiones en la numeración, calles que no existen, matrículas incorrectas o, simplemente, una letra ilegible. Los impresos de las multas incluyen este tipo de pifias, que pueden invalidar el proceso administrativo y, por tanto, librar al ciudadano de pagar la correspondiente sanción al Ayuntamiento.
El portavoz de la Guardia Urbana, Carles Reyner, afirma que las PDA's (del inglés personal digital assistant) o agendas electrónicas permitirán "reducir mucho las posibilidades de error". La razón es que el propio ordenador, que entre otras cosas incorpora una guía de calles de Barcelona, señalará que algo no va bien. "Si al poner el código de la infracción, el concepto de la sanción o la calle del infractor hay algún error, la agenda lo indica", añadió Reyner.
Es previsible, pues, que el nuevo sistema permita al Ayuntamiento de Barcelona ser más eficaz en el cobro de las multas. Un reciente informe del interventor municipal señalaba que el 45% de las multas que pone la Guardia Urbana por incumplimiento de las ordenanzas no llegan ni siquiera a introducirse en el sistema informático del consistorio, lo que hace imposible su tramitación y cobro. Ni Reyner ni el concejal de Seguridad, Ferran Julián, quisieron lanzar ninguna previsión sobre esta cuestión.
Trámites más rápidos
Los responsables municipales sí insistieron en que la PDA acortará los trámites administrativos. Desde que el agente entrega el boleto de la multa al ciudadano hasta que ésta se envía a la oficina de tramitación de denuncias de la Guardia Urbana, suelen pasar dos semanas. Ahora, los agentes descargarán el contenido de su pequeño ordenador de bolsillo en la oficina cuando terminen su jornada laboral. Un cambio que, según Reyner, ahorrará casi la mitad de tiempo (véase el artículo contiguo).
La agenda electrónica tiene aún otra aplicación: permite hacer fotografías. De esta forma, si un policía advierte algún desperfecto en la vía pública -"una farola o un banco roto", según Julián- puede retratarlo y hacerlo llegar on-line y al instante a los servicios de mantenimiento municipales. El objetivo es también hacer más cómodo el trabajo de la Policía Local. La PDA centraliza varias herramientas y documentos que, hasta ahora, el agente debía llevar encima. Además de las 330 PDA's, la Guardia Urbana se ha dotado de 150 impresoras portátiles y de cuatro furgonetas de atestados de última generación.