Encarcelados la madre y un tío de los dos niños que tomaban cocaína

"Mi hermano metió el dedo en la bolsita y lo lamió", confiesa uno de los menores

Un juez de Madrid ordenó ayer el ingreso en prisión de la madre cuyos hijos, de siete y tres años de edad, dieron positivo a la cocaína. El juez la envió a prisión por un delito de malos tratos a uno de los niños. El magistrado también decretó la cárcel para un tío de los menores, toxicómano. Los dos niños, la madre y el hermano de ésta vivían juntos en una infravivienda del barrio madrileño de Usera.

Antes de ordenar el ingreso en prisión de la madre y del tío de los niños, el juez y el fiscal dialogaron con con los menores. Especialmente con el de siete años. "Mi hermano metió el d...

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Un juez de Madrid ordenó ayer el ingreso en prisión de la madre cuyos hijos, de siete y tres años de edad, dieron positivo a la cocaína. El juez la envió a prisión por un delito de malos tratos a uno de los niños. El magistrado también decretó la cárcel para un tío de los menores, toxicómano. Los dos niños, la madre y el hermano de ésta vivían juntos en una infravivienda del barrio madrileño de Usera.

Antes de ordenar el ingreso en prisión de la madre y del tío de los niños, el juez y el fiscal dialogaron con con los menores. Especialmente con el de siete años. "Mi hermano metió el dedo en la bolsita y lo lamió", confesó el mayor. Se refería a una bolsa de cocaína que su tío tenía en casa el pasado 6 de junio. El niño de tres años sufrió ese día "un ataque", indicaron ayer fuentes jurídicas. Tuvo que ser ingresado en el hospital Doce de Octubre. Tras hacerle una analítica, los médicos diagnosticaron rápido la causa del mal: ingesta de cocaína.

El hospital y una profesora del centro escolar al que asisten los menores, a quien el juez ha catalogado como testigo protegido, avisaron a la policía. Los agentes acudió al colegio y se llevó a los niños. Con frecuencia los menores acudían al colegio con golpes y hematomas. Ambos fueron sometidos a un test y dieron positivo a la cocaína.

Además, los agentes vieron que el niño de tres años tenía cicatrices de una herida grave en la pierna. La madre confesó inicialmente que se la había hecho en el colegio, Más tarde admitió que le había dado un golpe con un palo que estaba rajado. El tío también ha ingresado en prisión por maltrato a los pequeños. "Cuando se enfadaba porque soplábamos el polvo [la cocaína], nos pegaba", ha confesado el niño de siete años, que presenta quemaduras de cigarro en el cuello. El juez ha ordenado el ingreso de ambos menores en un centro de protección de la Comunidad de Madrid.

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