Daño al medio ambiente y peligro de accidentes
Los vehículos de segunda mano vendidos de manera ilegal perjudican a la seguridad vial y al medio ambiente, según el presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), Juan Antonio Sánchez. "Al ser vehículos sin revisar y sin ningún tipo de garantía, no pasan los controles de emisión de gases, y, además, pueden tener una avería en cualquier momento, también cuando se está conduciendo. Como consecuencia, se pueden producir accidentes que se podrían haber evitado", advierte.
La procedencia de los automóviles también es desconocida. "L...
Los vehículos de segunda mano vendidos de manera ilegal perjudican a la seguridad vial y al medio ambiente, según el presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), Juan Antonio Sánchez. "Al ser vehículos sin revisar y sin ningún tipo de garantía, no pasan los controles de emisión de gases, y, además, pueden tener una avería en cualquier momento, también cuando se está conduciendo. Como consecuencia, se pueden producir accidentes que se podrían haber evitado", advierte.
La procedencia de los automóviles también es desconocida. "Los vehículos pueden llegar de cualquier punto, incluso de un desguace o del extranjero", denuncian desde Ganvam.
El negocio de venta callejera de coches se ceba "con los profesionales del sector", según Juan Antonio Sánchez. "Nosotros somos personas con un negocio legal, que pagamos impuestos, estamos sometidos a unos controles muy estrictos y damos trabajo a otras personas. Por supuesto, no podemos competir en precio con una persona que coloca los vehículos en la calle a modo de mercadillo ambulante. Hay competencia desleal", aclara.
Culpa de los que compran
Luis Arroyo, con un negocio legal de venta de coches en el distrito de Carabanchel, piensa que mucha "culpa" de este tipo de estafa la tienen las personas que adquieren en la calle un vehículo. "Nosotro también vendemos muchos coches a inmigrantes, no es necesario comprarlos de esa manera. Al final, lo barato termina saliendo caro", concluye.
En los parabrisas de los vehículos que Luis Arroyo vende cuelga un cartel donde aparecen los datos más relevantes: periodo de garantía, comisión-venta, ITV, servicio anterior, kilómetros, propietario, equipamiento, primera matrícula, etcétera. La garantía suele ser de un año.
Hay otra estafa relacionada con los vehículos de segunda mano que se está extendiendo por Internet. "Hace tres meses puse un anuncio en un foro y enseguida recibí tres correos electrónicos escritos en inglés de tres personas distintas que me decían que tenían en Estados Unidos un cliente interesado en comprar mi vehículo. Me explicaban que iban a ingresar en mi cuenta 7.000 euros por el transporte del vehículo al extranjero y me pedían todos mis datos personales", explica una afectada. A otra mujer le pasó algo similar, pero a través de una revista de anuncios de segunda mano.
Esta estafa consiste en que el talón que mandan los timadores es falso y, mientras el banco lo comprueba, los estafadores ya han tenido tiempo para llevarse el coche.