El Tribunal Superior anula la gestión de una nueva urbanización en Valdemarín

La Junta de Compensación de la zona había acordado construir 250 chalés en Aravaca

La Junta de Compensación de Valdemarín-Este se creó en 1999 para construir 250 chalés en Aravaca, junto al Hipódromo de la Zarzuela y la A-6. Ahora, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia ha anulado el acuerdo de pleno del Ayuntamiento de Madrid que aprobó el proyecto de bases y estatutos de la junta (unión de propietarios de suelo que urbanizan la zona), por ser contrario al ordenamiento jurídico. El Consistorio, que ha recurrido el fallo en casación ante el Supremo, considera que la sentencia sólo aprecia un defecto de forma de sencilla resolución.

Las obras avanzan con rapid...

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La Junta de Compensación de Valdemarín-Este se creó en 1999 para construir 250 chalés en Aravaca, junto al Hipódromo de la Zarzuela y la A-6. Ahora, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia ha anulado el acuerdo de pleno del Ayuntamiento de Madrid que aprobó el proyecto de bases y estatutos de la junta (unión de propietarios de suelo que urbanizan la zona), por ser contrario al ordenamiento jurídico. El Consistorio, que ha recurrido el fallo en casación ante el Supremo, considera que la sentencia sólo aprecia un defecto de forma de sencilla resolución.

Las obras avanzan con rapidez en la zona de Valdemarín, en Aravaca: el terreno, de 253.745 metros cuadrados, ya está urbanizado, las calles trazadas... Todo se encuentra dispuesto para iniciar la edificación de más de 250 chalés, en parcelas de 500 y 750 metros cuadrados, que se venderán (según están los precios en la zona) por unos 1.500.000 euros. El proyecto incluye un área de oficinas.

El problema surgió cuando Miguel San Román, propietario de una finca de 7.500 metros cuadrados ubicada dentro de este espacio, se negó a entrar en la Junta de Compensación. El afectado interpuso un recurso contencioso-administrativo contra las bases y estatutos de la junta aprobados por el Ayuntamiento en el pleno del 5 de noviembre de 1999. San Román argumentaba que dicha autorización era nula, porque el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid en la zona de Valdemarín-Aravaca era inaplicable debido a que sufrió modificaciones sustanciales que no se publicaron. Por tanto, no hubo periodo de alegaciones y los interesados no tuvieron oportunidad de mostrar su oposición a estos cambios.

Nulas de pleno derecho

Ante la postura de San Román, el Ayuntamiento inició los trámites de expropiación de su finca. El próximo 24 de abril, la propiedad pasará a manos del municipio. Sin embargo, el afectado sostiene: "Con esta sentencia todas las actuaciones llevadas a cabo por la Junta de Compensación son nulas de pleno derecho. Por tanto, se debería parar la expropiación y las obras de urbanización de la zona".

San Román explica: "La Comunidad de Madrid obligó al Ayuntamiento a bajar la edificabilidad en la zona, y esta modificación, junto con otras que se produjeron, es sustancial y debería haber salido a información pública cuando se aprobó el Plan General de Ordenación Urbana. De esa forma me habrían dado la oportunidad de interponer alegaciones para no tener que abandonar mi casa".

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El Tribunal Superior de Justicia le ha dado la razón. La sentencia recuerda que uno de los cambios producidos fue la aparición de un área nueva de reparto, denominada APE 09.24, que el Plan General de Ordenación Urbana, publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid de 19 de abril de 1997, no incorpora.

El Colegio Oficial de Arquitectos (COAM), en un informe de febrero de 2004, también consideró que el Plan General de Madrid había sufrido cambios sustanciales en la zona, sin que se hubieran publicado y sin periodo de información pública. El estudio indica que al barrio se le cambió la ordenanza de aplicación y se le modificaron las superficies y edificabilidades de uso lucrativo. Todo ello, según el colegio, sin pasar por el correspondiente periodo de información pública.

"Yo respeto la decisión de la Junta de Compensación, pero quiero que me dejen vivir en mi casa porque creo que hay que preservar nuestra vivienda y la riqueza de arbolado, de plantas y animales de la parcela", explica el propietario.

Ecologistas en Acción se ha unido a la causa de San Roman y su familia y coincide en señalar el daño irreparable que se les causa y el valor ambiental de la parcela, donde crecen 196 árboles de 25 especies diferentes. El portavoz de Ecologistas en Acción, Juan García, afirmó que, además, el Ayuntamiento de Madrid ha actuado con "prepotencia" al permitir la destrucción de este pulmón verde que servía de pasillo ecológico entre el río Manzanares, la Casa de Campo y El Pardo.

El Ayuntamiento sigue adelante con la expropiación, y mantiene que la sentencia sólo aprecia un defecto de forma en la tramitación, que se subsanará con la publicación de la normativa en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid.

La Junta de Compensación ha recurrido la sentencia, con la que no está de acuerdo. Ángel Murcia, gerente de la junta, sostiene también que con la publicación en el boletín oficial se solventará el problema.

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