El historiador José María García León describe la trayectoria de los 305 diputados doceañistas

El libro relata cómo se elaboró en Cádiz la primera Constitución española

Han pasado casi 200 años desde que San Fernando y Cádiz se convirtieran en las sedes de las Cortes de 1812, donde nació la primera Constitución y donde la historia española dio un vuelco inolvidable. Y, a pesar del tiempo transcurrido, los historiadores ni siquiera se habían puesto de acuerdo en el número total de diputados que acudieron a aquellas sesiones. "Fueron 305", sentencia el historiador gaditano José María García León, quien acaba de concluir Los diputados doceañistas, un libro donde, por primera vez, pone nombres y apellidos a todos ellos.

El trabajo de García León est...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Han pasado casi 200 años desde que San Fernando y Cádiz se convirtieran en las sedes de las Cortes de 1812, donde nació la primera Constitución y donde la historia española dio un vuelco inolvidable. Y, a pesar del tiempo transcurrido, los historiadores ni siquiera se habían puesto de acuerdo en el número total de diputados que acudieron a aquellas sesiones. "Fueron 305", sentencia el historiador gaditano José María García León, quien acaba de concluir Los diputados doceañistas, un libro donde, por primera vez, pone nombres y apellidos a todos ellos.

El trabajo de García León está resumido en dos tomos que acaba de presentar el grupo Joly. Se trata de una edición especial, a la espera de una inminente que saldrá a la venta en librerías. No ha sido fácil para el historiador condensar 305 historias en estas páginas. "No quería que fuera una enumeración general ni superficial. Requería de un contexto histórico, que explicara las condiciones de cómo sucedió todo, necesitaba también detallar a qué grupos pertenecía cada uno de ellos, su origen, su condición política y su posición económica", explica.

Este repaso es un homenaje a muchos de ellos, hoy totalmente anónimos, a los que la Historia ha dejado en el cajón de los olvidados. "Hay muchos diputados hoy abiertamente recordados como Argüelles, pero otros muchos ni se recuerdan. Me he puesto en contacto con sus pueblos de origen y allí no sólo no sabían que uno de sus vecinos había sido diputado doceañista. Es que ni siquiera sabían quién era y si había nacido allí", afirma.

García León ha buceado para este trabajo en muchos archivos. Su labor "casi detectivesca" le ha llevado por los archivos de las Cortes de Madrid, documentos privados, registros clericales y militares. Ha revisado las actas de las sesiones de 1812, que eran abiertas, y también aquellas, que por su carácter más reservado, se hicieron sin público. "Es lo que me ha permitido conocer el número exacto de diputados y explicar cuál fue su papel". Unos y otros actuaron de forma diferente. Algunos triunfaron con discursos grandilocuentes; otros permanecieron en silencio. Unos residían en Cádiz; otros tardaron ocho meses en cruzar el océano para asistir a las Cortes.

El historiador realiza una agrupación de los diputados, fundamentalmente, política. Destaca el enorme poder que tuvo el grupo liberal. "Era pequeño, apenas 30 personas, pero su repercusión fue enorme. Tenían las ideas muy claras y supieron llevarse el gato al agua. Aquí estaban Argüelles y Calatrava". Este grupo pudo imprimir el carácter avanzado e innovador de la Constitución que se promulgó en Cádiz el 19 de marzo de 1812.

Hispanoamericanos

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Otro grupo fue el reformista, que quería cambiar las cosas pero manteniendo la tradición española. El más numeroso, fue el eclesiástico (97 miembros). Y especialmente destacado, por la trascendencia de su presencia, fue el de hispanoamericanos, 67 en total, junto con tres filipinos. "Eran considerados españoles y tenían los mismos derechos". Como muestra, fue un mexicano el que clausuró las Cortes.

García León utiliza su trabajo, en el que ha invertido cuatro años, para desterrar algunos mitos. Como el de la unanimidad. "Hubo mucha disparidad de opiniones. Y algunos conceptos generaron gran controversia". Uno de ellos fue el concepto de nación española. La idea de España como unidad central, frente a los intereses ultramarinos y de otros territorios españoles que reclamaban otra división con más competencias para ellos. "Fue lo que provocó que algunos diputados hispanoamericanos y vascos no juraran la Constitución. La apoyaron por imperativo legal", detalla el autor. "Han pasado 200 años y el debate sigue siendo el mismo".

Archivado En