El nuevo IRPF ahorrará unos 160 euros a los contribuyentes con rentas medias

Los sueldos inferiores a 9.000 euros al año no pagarán el impuesto a partir de 2007

La reforma del IRPF, que el Gobierno aprobará en marzo, beneficiará a prácticamente todos los contribuyentes, aunque en mayor medida cuanto menor es la renta y mayor el número de hijos. El contribuyente de renta media, que gana unos 30.000 euros al año y tiene dos hijos, podrá ahorrar unos 160 euros en su declaración anual, según cálculos oficiales. Otro contribuyente, con una renta de 18.000 euros y también dos hijos, ahorrará unos 285 euros. Con la reforma, los sueldos inferiores a 9.000 euros (después de los descuentos familiares y la deducción por trabajo) no pagarán IRPF.

La rebaja...

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La reforma del IRPF, que el Gobierno aprobará en marzo, beneficiará a prácticamente todos los contribuyentes, aunque en mayor medida cuanto menor es la renta y mayor el número de hijos. El contribuyente de renta media, que gana unos 30.000 euros al año y tiene dos hijos, podrá ahorrar unos 160 euros en su declaración anual, según cálculos oficiales. Otro contribuyente, con una renta de 18.000 euros y también dos hijos, ahorrará unos 285 euros. Con la reforma, los sueldos inferiores a 9.000 euros (después de los descuentos familiares y la deducción por trabajo) no pagarán IRPF.

El ahorro baja mucho cuando no hay hijos y se presenta la declaración individual
La reforma entrará en vigor en enero de 2007 y se notará en las nóminas de ese año

La rebaja del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), en su conjunto, tendrá un coste para Hacienda de unos 2.000 millones de euros. No es una cantidad desbordante para un impuesto que recauda unos 50.000 millones al año y es el primero entre todos los que ingresa el Estado. Pero sí puede dar alguna alegría a los contribuyentes asalariados, que son la inmensa mayoría de los 16 millones que declaran el impuesto.

La ganancia es generalizada, salvo algún caso muy extremo que se quedaría como está. Viene derivada de la rebaja de la tarifa (el tipo máximo pasa del 45% al 43%), de la ampliación de las cantidades de cada tramo (mayores ingresos tributan a un tipo igual o más bajo) y del aumento de la deducción por rentas del trabajo (hasta 4.000 euros, frente a los 3.500 actuales para quienes ganan menos de 9.000 euros, y 2.600 frente a 2.400 para quienes ganan más de 13.000).

Todos ganan, pero unos más que otros. La reforma contiene un efecto favorable a las rentas más bajas, al eliminarse el mínimo familiar de la reforma fiscal del Partido Popular y sustituirse por un tramo a tipo cero, que también tiene en cuenta el número de hijos, la edad, las situaciones de discapacidad y los ascendientes. La diferencia es que el mínimo familiar ahorra más impuestos cuanto más alta es la renta, y en el tramo a tipo cero el ahorro es relativamente igual.

Si se aplican estos cambios a un universo de contribuyentes que abarca el 90% del total con declaraciones sencillas, se pueden ver los efectos más generales de la reforma. Los ejemplos, elaborados por la Agencia Tributaria, comparan el actual y el nuevo IRPF para rentas anuales de 18.000 y de 30.000 euros, a las que se les ha descontado el tramo a tipo cero por las circunstancias familiares y la deducción por trabajo, y que presentan diferentes tipos de declaraciones (véase cuadro).

Por ejemplo, un contribuyente que gana 30.000 euros al año, presenta declaración conjunta -con su mujer o marido, o el hijo si es monoparental- y tiene dos hijos se ahorra con el nuevo impuesto de la renta 161,60 euros. Otro contribuyente, en las mismas circunstancias familiares que el anterior pero que gana 18.000 euros, se ahorra 285,50 euros.

El ahorro baja mucho y la diferencia también se acorta cuando no hay hijos y se presenta declaración individual (61,60 euros para el contribuyente que gana 30.000 y 69,50 para el de 18.000).

Aunque 30.000 euros no puede considerarse un sueldo alto, para el impuesto sobre la renta sí lo es. De hecho, el 84,23% de los contribuyentes declara en la actualidad ingresos inferiores a esa cantidad. El porcentaje asciende al 91% si se incluyen los contribuyentes que ganan menos de 37.000 euros al año. La nueva tarifa del IRPF está topada en 52.360 euros. Todo lo que exceda de esa cantidad paga el 43%.

Entre los ejemplos elaborados por la Agencia Tributaria, el caso de mayor ahorro (447 euros) del impuesto está en un contribuyente que gana 18.000 euros, tiene tres hijos y presenta declaración conjunta. El caso de menor ahorro (61,60 euros) está en el contribuyente que gana 30.000 euros, no tiene hijos y presenta cualquier modelo de declaración.

La reforma también modifica los umbrales a partir de los cuales no se pagan impuestos. Los ejemplos sitúan ese umbral en rentas de 9.050 euros al año para una declaración individual. Con el anterior impuesto, ese umbral estaba en 6.900 euros para el mismo contribuyente. En el caso de una familia con dos hijos que presenta declaración conjunta, ese umbral se eleva de 13.200 euros actuales a 16.250.

La reforma se encuentra ahora en capilla, a la espera de que las organizaciones sociales, asesores y expertos envíen sus observaciones al anteproyecto de ley.

El Ministerio de Hacienda tiene previsto que el Consejo de Ministros apruebe esta reforma en la reunión del próximo 10 de marzo. A partir de ahí iniciará la tramitación parlamentaria.

La entrada en vigor será en enero de 2007, y se notará en las retenciones de las nóminas de ese año. La declaración-liquidación correspondiente se presentará a mediados del año 2008.

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