Jacques Chirac es hospitalizado de urgencia en París tras sufrir un accidente vascular

El presidente francés, de 72 años, permanecerá ingresado una semana en un hospital militar

El presidente de la República Francesa, Jacques Chirac, de 72 años, fue ingresado de urgencia el viernes por la noche en el hospital militar de Val-de-Grâce, en París. Según el parte firmado por los médicos del centro sanitario, Chirac ha sufrido "un pequeño accidente vascular que ha comportado trastornos de la visión que debieran desaparecer los próximos días". La hospitalización ha de comportar una serie de análisis del sistema sanguíneo del paciente y, en concreto, un escáner cerebral. Su ingreso en Val-de-Grâcre se prolongará "alrededor de una semana".

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El presidente de la República Francesa, Jacques Chirac, de 72 años, fue ingresado de urgencia el viernes por la noche en el hospital militar de Val-de-Grâce, en París. Según el parte firmado por los médicos del centro sanitario, Chirac ha sufrido "un pequeño accidente vascular que ha comportado trastornos de la visión que debieran desaparecer los próximos días". La hospitalización ha de comportar una serie de análisis del sistema sanguíneo del paciente y, en concreto, un escáner cerebral. Su ingreso en Val-de-Grâcre se prolongará "alrededor de una semana".

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La noticia de la hospitalización de Chirac permaneció en secreto hasta bien entrada la mañana de ayer, cuando fue desvelada por el primer ministro, Dominique de Villepin, que se encontraba en la localidad atlántica de La Baule para intervenir en la llamada Universidad de Verano de la Unión para un Movimiento Popular (UMP), el partido en el poder. Villepin aseguró que había podido hablar telefónicamente "durante largo rato" con el presidente "para analizar, evidentemente, la agenda de los próximos días". Chirac tenía previsto entrevistarse con el canciller alemán, Gerhard Schröder, el próximo martes y presidir el Consejo de Ministros del miércoles.

Candidato en cuatro ocasiones a la presidencia de la República -en 1981, 1988, 1995 y 2002- y vencedor en las dos últimas, Chirac ha exhibido siempre una salud de hierro. Antiguo fumador compulsivo, Chirac tiene fama de ser un amante de la buena mesa y del buen vino, pero eso no le ha impedido mantenerse siempre en buena forma, al menos en apariencia.

El ministro del Interior y líder de la UMP, Nicolas Sarkozy, dijo "desear que el presidente recupere su vitalidad legendaria". Hasta 1978, Chirac practicaba varios deportes. Pero ese año, a raíz de un grave accidente de coche que le forzó a una prolongada inmovilización para curar sus múltiples fracturas, el tenis o el atletismo desaparecieron de su vida cotidiana.

Entre 1999 y 2000, Chirac pareció aumentar de peso de manera importante, y el aspecto hinchado de su rostro se atribuyó tanto a la cortisona como a la cerveza. En 2003, varias indiscreciones periodísticas descubrieron que Chirac tenía problemas de oído y utilizaba, ocasionalmente, un audífono, detalle que fue desmentido después por el palacio del Elíseo.

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La ausencia y el silencio de Chirac durante el verano de 2003, en la ola de calor que causó 15.000 muertes de ancianos o enfermos graves, dio pie al rumor de que se había sometido a una intervención quirúrgica secreta.

La salud de los presidentes de la República ha sido objeto de diversas polémicas políticas en Francia, sobre todo a raíz de la muerte, en 1974, de Georges Pompidou, víctima de una forma poco frecuente de cáncer de sangre.

El candidato conservador Valéry Giscard d'Estaing prometió hacer públicos dos partes médicos anuales sobre su salud. Pero una vez elegido olvidó la promesa. El socialista François Mitterrand sí difundió sus informes médicos, pero incompletos, y ocultó hasta 1992 su cáncer de próstata, detectado 10 años antes.

Chirac ha optado por obviar cualquier consideración sobre su salud y ha llegado al extremo de suprimir desde hace dos años la celebración de su cumpleaños. Para poder mantener sus opciones a optar a un tercer mandato en 2007, Chirac estima conveniente ocultar, en la medida de lo posible, que ese mismo año cumplirá los 75.

Seguir al mando

La hospitalización de Chirac ha ido acompañada de una serie de gestos destinados a demostrar que el presidente sigue al mando. Por la mañana fue Villepin. Por la tarde, Frédéric Salat-Baraoux, jefe de gabinete del Elíseo, acudió al hospital de Val-de-Grâce para despachar una serie de asuntos pendientes. Y Villepin, de regreso en la capital francesa, también visitó al presidente en su habitación. Entre otras cosas, para mantenerle al corriente de la evolución del escándalo del incendio de los inmuebles de emigrantes, que ayer movilizó a 10.000 manifestantes en París.

El diputado Bernard Debré, médico de profesión, ha declarado que "Chirac deberá frenar su actividad y limitar al máximo sus viajes en avión para evitar exponerse a los cambios de presión". Debré es hermano del actual presidente de la Asamblea Nacional, Jean-Louis Debré, hombre de confianza de Chirac. Otro médico, el cardiólogo Alain Ducardonnet, estimó que la "hospitalización es capital para evitar un accidente más grave".

Jacques Chirac, el pasado lunes en el palacio del Elíseo.ASSOCIATED PRESS

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