Famosa menemista busca escaño en Argentina

"Voy a darte una primicia", le dijo una conocida artista argentina en directo a Susana Giménez, una de las estrellas de la televisión argentina. La autora de la frase, Ana María Casanovas, más conocida como Moria Casán, es una vedette de 53 años con una larga trayectoria, habitual de las revistas y programas del corazón y que no tiene pelos en la lengua. Hasta entonces, la charla televisiva había seguido los cauces habituales, hasta que Casán anunció que se presentaba como candidata a congresista en las elecciones legislativas del próximo 23 de octubre. Su irrupción en la política ha de...

"Voy a darte una primicia", le dijo una conocida artista argentina en directo a Susana Giménez, una de las estrellas de la televisión argentina. La autora de la frase, Ana María Casanovas, más conocida como Moria Casán, es una vedette de 53 años con una larga trayectoria, habitual de las revistas y programas del corazón y que no tiene pelos en la lengua. Hasta entonces, la charla televisiva había seguido los cauces habituales, hasta que Casán anunció que se presentaba como candidata a congresista en las elecciones legislativas del próximo 23 de octubre. Su irrupción en la política ha desatado la convicción entre algunos analistas de que se trata de un submarino del ex presidente Carlos Menem y ha inquietado e irritado a la clase política.

"Kirchner es lo peor que le pasó a este país". "Si entro en el Congreso voy a ser una cámara oculta con tetas". "Tengo fama, dinero y poder, quiero ir al Congreso a ayudar a las mujeres, mis aliadas". Moria Casán, que se presenta con el Movimiento Federal de Centro, dispara sus frases en las entrevistas igual contra el presidente argentino, por una cuestión política, que contra otras actrices por litigios de escenarios... Pero su estrategia está dando resultado. Más allá de los tópicos sobre el mundo de la farándula en la política argentina y los inevitables juegos de palabras sobre hasta dónde llega la mezcla entre espectáculo y Parlamento, la irrupción de Moria Casán en el panorama electoral argentino inquieta a la clase política, porque las encuestas señalan que la vedette obtendrá un escaño en la Capital Federal y el gran perjudicado puede ser el candidato de la nueva coalición de centro-derecha y presidente del club de fútbol Boca Juniors, Mauricio Macri.

Otro dato que provoca el recelo del establishment político es la fidelidad declarada de Casán al ex presidente argentino Carlos Menem. "Menem hizo cosas buenas y voy a apoyar su reelección", ha declarado en diversas entrevistas la candidata a congresista, revelando así un escenario poco agradable tanto para el actual presidente, Néstor Kirchner, como para el todavía hombre fuerte del Partido Justicialista, el ex presidente Eduardo Duhalde. Para ambos, las elecciones del próximo octubre supondrán la piedra de toque sobre quién controla de verdad el partido, algo fundamental con vistas a las elecciones presidenciales de 2007.

Y en esas llega un personaje popular y con tirón y hace pública su lealtad a Menem, quien fue el candidato más votado en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 2003. Menem nunca llegó a medirse en la segunda vuelta con Kirchner porque se retiró.

Pero Moria Casán tiene dos grandes ventajas frente a quienes critican su entrada en la política. No necesita ni el dinero ni la fama. Lleva más de 30 años trabajando en los teatros y televisiones argentinas y tiene un público fiel. En la actualidad protagoniza una serie de televisión y una revista musical, esta última con un título que es un programa político en sí mismo: El Fondo puede esperar.