El Gobierno apremia a Xfera para que comience a operar este año

El Ejecutivo ha dado un ultimátum a Xfera, la cuarta compañía de telefonía móvil, que está inactiva. Si no presenta un plan detallado de despliegue de red y de lanzamiento comercial antes de otoño con el fin de salir al mercado en este año, adoptará medidas que pueden llevar a la retirada de la licencia que obtuvo en marzo de 2000. Florentino Pérez, presidente de ACS, máximo accionista de Xfera, ha prometido al ministro de Industria, José Montilla, que reactivará el proyecto este año.

Xfera puede tener los días contados. El Gobierno se ha cansado de esperar a que el cuarto operador de t...

El Ejecutivo ha dado un ultimátum a Xfera, la cuarta compañía de telefonía móvil, que está inactiva. Si no presenta un plan detallado de despliegue de red y de lanzamiento comercial antes de otoño con el fin de salir al mercado en este año, adoptará medidas que pueden llevar a la retirada de la licencia que obtuvo en marzo de 2000. Florentino Pérez, presidente de ACS, máximo accionista de Xfera, ha prometido al ministro de Industria, José Montilla, que reactivará el proyecto este año.

Xfera puede tener los días contados. El Gobierno se ha cansado de esperar a que el cuarto operador de telefonía móvil guarde la licencia que consiguió en un cajón. En las negociaciones que mantiene el Ministerio de Industria con el operador le ha advertido de que si no presenta un plan definido y concreto de despliegue de antenas y una calendario de estreno comercial antes de otoño, adoptará medidas contra el operador que pueden desembocar en la retirada de la licencia que ganó en 2000, informaron en fuentes gubernamentales.

Desde que obtuvo la concesión hace cinco años, la operadora -controlada por las constructoras ACS y FCC y la compañía finlandesa Sonera- ha incumplido todos los compromisos adquiridos con los diferentes ejecutivos del PP, que le liberó los avales de 4.600 millones de euros comprometidos cuando ganó el concurso. Tras anunciar la congelación del proyecto y despedir a la mayor parte de la plantilla, Xfera no ha dado señales de vida, hasta la convocatoria del nuevo concurso para las licencias en la banda de frecuencias de 900 megahercios.

Y es que a pesar de su inactividad, el operador ha decidido competir por estas frecuencias, junto a las otras tres compañías con actividad comercial (Telefónica Móviles, Vodafone y Amena). Además, hay al menos otros dos candidatos: Telmex, del mexicano Carlos Slim, y France Télécom. El plazo para la presentación de licencias concluye el 12 de mayo, y la resolución del concurso antes del 20 de junio.

Tal vez debido a estas presiones, Florentino Pérez, en un reciente encuentro con el ministro de Industria, José Montilla, le aseguró que el proyecto de Xfera arrancará antes de que acabe el año, informaron en fuentes de los socios del operador. ACS es el mayor accionista de Xfera con el 34,8%, y mantiene un pacto con Sonera que le otorga la mayoría en el consejo.

Xfera está en búsqueda de acuerdos con otros operadores internacionales como Hutchison o Slim para darles entrada en su accionariado, del que salió la francesa Vivendi, que vendió su participación por un simbólico euro.

El objetivo primero del concurso para la concesión de nuevas licencias es extender la telefonía móvil a zonas con nula o deficiente cobertura y, en particular, localidades con población igual o inferior a 400 habitantes que no están cubiertas por ningún operador.

No obstante, Industria quiere utilizar ese concurso como un instrumento para forzar a los operadores a bajar las tarifas porque cree que hay margen para ello.

El Ministerio sigue estudiando la conveniencia de cambiar la regulación para forzar la aparición de operadores móviles virtuales, compañías que no disponen de una red propia.

Estas compañías desconocidas en España, ya operan en otros países, con especial éxito en el Reino Unido (Virgin Mobile y Easy Jet) y países nórdicos (Tele 2, Sense, Telmore y ACN). Su negocio es comprar al por mayor minutos y servicios telefónicos a los operadores establecidos y revenderlos a sus clientes. En España no ha sido posible su implantación porque no han llegado a acuerdos con Telefónica, Vodafone y Amena.