Camps presenta ahora el Plan de la Inmigración que el Consell anunció hace cuatro años

Cuatro años después de su anuncio por el entonces consejero de Bienestar Social, Rafael Blasco, el Plan Valenciano de la Inmigración fue ayer presentado por el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y Alicia de Miguel, actual responsable de políticas sociales.

De Miguel señaló que el Gobierno valenciano destinará la mayor parte (el 91,5%) de los 939 millones de inversiones previstos hasta 2007 al área de Cultura y Educación (645 millones) y Sanidad (214). Asociaciones del entorno de la inmigración apuntan que el plan apenas aporta nada nuevo.

El programa incluye 191 medid...

Cuatro años después de su anuncio por el entonces consejero de Bienestar Social, Rafael Blasco, el Plan Valenciano de la Inmigración fue ayer presentado por el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y Alicia de Miguel, actual responsable de políticas sociales.

De Miguel señaló que el Gobierno valenciano destinará la mayor parte (el 91,5%) de los 939 millones de inversiones previstos hasta 2007 al área de Cultura y Educación (645 millones) y Sanidad (214). Asociaciones del entorno de la inmigración apuntan que el plan apenas aporta nada nuevo.

El programa incluye 191 medidas que articulan "un modelo de integración propio que se caracteriza por la defensa de la diversidad y la diferencia como factores que enriquecen" además del "respeto a los valores culturales de los valencianos como pueblo", según afirmó De Miguel.

La diputada socialista Nuria Espí criticó que "no se haya consensuado por los colectivos" ni se haya debatido en Cortes. En ello abundaron representantes de sindicatos que presentaron modificaciones al proyecto y, apuntaron, aún no habían recibido el documento final.

El Ayuntamiento de Valencia hizo pública ayer una encuesta que revela que más de la mitad de los vecinos de la ciudad (55,1%) opina que el número de inmigrantes es excesivo. El informe elaborado por el Centro de Estrategias y Desarrollo, que dirige el concejal Juan Eduardo Santón, refleja que el 32,7% considera que hay bastantes inmigrantes pero no demasiados, mientras que otro 2,4% cree que son pocos. La encuesta recoge que el 34,5% considera que la inmigración es "más bien positiva", y un 25,4% "más bien negativa".

Mientras, el proceso de regulación de inmigrantes fue objeto ayer de una nueva polémica en Castellón, donde el Ayuntamiento sólo ha resuelto cinco de las 250 solicitudes que se han presentado para acogerse al empadronamiento por omisión, informa María Fabra. La concejal de Bienestar Social, Carmen Amorós, calificó ayer de "inviable" el empadronamiento con documentos como la tarjeta de asistencia sanitaria. Amorós señaló que parte de esos documentos exigen ya estar empadronado. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno indicaron que "hace tres años, no era necesario el empadronamiento para obtener una tarjeta sanitaria y mucho menos para pedirla".