Una cuarta parte de los médicos catalanes superan los 55 años
Las jubilaciones agravarán la endémica falta de facultativos en 2015, alertan los sindicatos
El envejecimiento de la profesión médica catalana pasará factura al sistema sanitario de esta comunidad dentro de una década. Los sindicatos alertaron ayer de que a pesar de que en los próximos años España tendrá 40.000 facultativos más que en la actualidad, en 2020 (cinco años antes en Cataluña, por ser una de las comunidades con la población médica más envejecida) se producirá un "vertiginoso" y preocupante descenso del número de profesionales.
Casi una cuarta parte de los 24.000 médicos que hay en Cataluña (el 23,76%) tienen más de 55 años, un porcentaje que supera la media española,...
El envejecimiento de la profesión médica catalana pasará factura al sistema sanitario de esta comunidad dentro de una década. Los sindicatos alertaron ayer de que a pesar de que en los próximos años España tendrá 40.000 facultativos más que en la actualidad, en 2020 (cinco años antes en Cataluña, por ser una de las comunidades con la población médica más envejecida) se producirá un "vertiginoso" y preocupante descenso del número de profesionales.
Casi una cuarta parte de los 24.000 médicos que hay en Cataluña (el 23,76%) tienen más de 55 años, un porcentaje que supera la media española, del 19,2%. En un plazo de entre 15 y 20 años, la mitad de los facultativos superarán esta edad, según el estudio Demografía médica en España. Mirando al futuro, realizado por la Fundación de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM).
La radiografía de la profesión médica que presenta el trabajo no es muy halagüeña y por ello los sindicatos consideraron ayer "de imperiosa necesidad" que las administraciones "se tomen de una vez en serio la planificación de los recursos sanitarios". En los próximos 15 años, señala el documento, aumentará en unos 40.000 el número de médicos en España (169.319). Este incremento, temen los sindicatos, será "difícilmente absorbible por el sistema sanitario español" y creará más precariedad o necesidad de emigrar a otros países en busca de unas condiciones laborales dignas.
Pero este previsible exceso de médicos tendrá pronto sus días contados. El motivo es que aunque la proporción de médicos por encima de los 55 años no es todavía alarmante, por debajo de esta edad se acumula un número importante de profesionales que se jubilarán masivamente a partir del año 2020. El proceso se adelantará cinco años (en 2015) en las comunidades con mayor proporción de facultativos de edad avanzada, como Cataluña. Según los sindicatos, esta jubilación generalizada de profesionales originará un importante descenso del número total de médicos "que no podrá ser compensado por las nuevas promociones si se mantienen las condiciones actuales de acceso a la profesión".
El problema se agravará, según alertó ayer el secretario general de la CESM, Carlos Amaya, si continúa la fuga de facultativos hacia otros países y el abandono de la profesión. Amaya avanzó que si no se frena la actual tendencia, unos 12.000 facultativos dejarán la profesión o marcharán fuera de España en los próximos años.
La falta de médicos afectará a unas especialidades más que a otras. Ya hace años que en Cataluña hay problemas para cubrir plazas de pediatría, cirugía torácica y vascular, neurocirugía o anestesiología. Se trata de un problema que podría minimizarse adecuando las plazas de formación de médicos internos residentes (MIR) a las necesidades de cada comunidad autónoma, según el secretario general de Metges de Catalunya y presidente de la Fundación CESM, Patricio Martínez.
La confederación de sindicatos también reclama a las administraciones que en la planificación de recursos sanitarios tengan en cuenta la progresiva feminización de la profesión médica. En la actualidad, el 47,46% de los profesionales de la medicina son mujeres, un porcentaje que "se aproximará al 60% hacia el año 2030". Ello repercutirá, previsiblemente, en una mayor demanda de reducción de la jornada laboral y de bajas por maternidad.
El secretario de Metges de Catalunya entregó ayer el informe a la consejera de Salud, Marina Geli. Patricio Martínez expresó su inquietud por la polémica jubilación forzosa de 350 especialistas en Cataluña, cuyas plazas, aseguró, aún no se han cubierto en su totalidad, lo que ha incrementado de 45 a 80 días la espera para muchas pruebas prediagnósticas.