Crítica:POR MENOS DE 15 EUROS

La onda macrobiótica

La vida de María Antonia Moreno dio un giro de 180 grados hace 15 años. Vendió todos sus negocios y empezó a estudiar el porqué de la cocina macrobiótica. Ahora dirige, junto a un hijo, un restaurante en el barrio barcelonés del Raval, Organic, una mezcla de comida macrobiótica, vegetariana y mediterránea. El método está claro: "Es algo tan básico como seguir las estaciones del año y sus productos. Sobre todo, no invertir nunca el orden de las estaciones. Monté un restaurante para dar de comer bien a la gente, con dignidad y a un precio razonable", explica María Antonia Moreno. Entre un tomate...

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La vida de María Antonia Moreno dio un giro de 180 grados hace 15 años. Vendió todos sus negocios y empezó a estudiar el porqué de la cocina macrobiótica. Ahora dirige, junto a un hijo, un restaurante en el barrio barcelonés del Raval, Organic, una mezcla de comida macrobiótica, vegetariana y mediterránea. El método está claro: "Es algo tan básico como seguir las estaciones del año y sus productos. Sobre todo, no invertir nunca el orden de las estaciones. Monté un restaurante para dar de comer bien a la gente, con dignidad y a un precio razonable", explica María Antonia Moreno. Entre un tomate arrancado de la huerta y una lata de conservas, Organic se decanta siempre por el tomate. En la cocina no entran ni latas ni congelados. Tampoco la carne, el pollo ni el pescado.

Restaurante Organic

Junta de Comerç, 11. Barcelona.

Abre a diario, de 12.00 a 24.00

horas. Teléfono 933 01 09 02.

El menú de mediodía cuesta ocho euros, bebidas y café aparte. De primero, sopa o gazpacho; después, un bufé libre de ensaladas; para acabar, cinco platos a elegir, y postres caseros. En la carta de noche hay platos como una pirámide de hojaldre a la menta con ricota por 9,90 euros, una crepe provenzal con berros y módena por 10,25 o calzone al horno con guacamole a 10,50 euros. También hacen zumos naturales: el mediterráneo, con naranja, cava y vainilla, tiene un precio de 4,95 euros.

En Organic, además de comer, hay otras distracciones. A la entrada, una herboristería vende toda clase de tés y hierbas medicinales, y se hacen masajes de 20 minutos por 10 euros para desbloquear las contracturas de la rutina diaria. Por las noches se organizan espectáculos, que cuentan con la actuación de un dj. El local es muy amplio, con grandes lámparas y ventiladores, diseñado siguiendo la filosofía del arte ancestral chino feng shui.

María Antonia Moreno tiene muchos planes para Organic. El siguiente paso es abrir una tienda de comida vegetariana para llevar en el mercado barcelonés de la Boquería. Otro de sus deseos es abrir una escuela de cocina vegetariana. ¿Cuál es el secreto de este tipo de comida? No lo esconde: "El secreto es cocinar con las raíces de donde habitas".

El restaurante Organic, en el barrio del Raval de Barcelona.SUSANNA SÁEZ

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