200 millones de chinos sufren exceso de peso

Doscientos millones de personas sufren exceso de peso y 60 millones están obesas en China a causa de los profundos cambios de los hábitos de vida en las dos últimas décadas en este país de 1.300 millones de habitantes, según una exhaustiva investigación del Ministerio de Sanidad chino. El problema, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), "tiene casi proporciones de epidemia". El consumo de grasas y sal y una vida más sedentaria han disparado también la propagación de otras enfermedades, como la diabetes y la hipertensión.

El estudio, realizado entre agosto y diciembre de 2002 y...

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Doscientos millones de personas sufren exceso de peso y 60 millones están obesas en China a causa de los profundos cambios de los hábitos de vida en las dos últimas décadas en este país de 1.300 millones de habitantes, según una exhaustiva investigación del Ministerio de Sanidad chino. El problema, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), "tiene casi proporciones de epidemia". El consumo de grasas y sal y una vida más sedentaria han disparado también la propagación de otras enfermedades, como la diabetes y la hipertensión.

El estudio, realizado entre agosto y diciembre de 2002 y hecho público ahora, asegura que el 7,1% de los adultos sufre obesidad. En las ciudades, la cifra sube hasta el 12,3% en el caso de los mayores, y es del 8,1% en los niños. El informe subraya los desequilibrios alimentarios que padece China, donde la malnutrición entre los niños rurales sigue siendo "bastante seria".

Desde 1992, el número de personas con gordura excesiva se ha duplicado y el de las que tienen demasía de peso ha crecido un 39%. Al mismo tiempo, se ha multiplicado la cifra de afectados por la hipertensión -160 millones- y por la diabetes -20 millones-, lo que no ha pasado inadvertido a las compañías farmacéuticas extranjeras. "La población no está concienciada y carece de conocimientos sobre lo que es una dieta razonable", ha dicho el viceministro de Sanidad, Wang Longde.

Según la OMS, el problema es una consecuencia del fuerte desarrollo que ha experimentado el gigante asiático. "En China coexisten los tradicionales problemas de salud en las zonas rurales, como la tuberculosis o los generados por las deficiencias sanitarias, con los derivados del éxito económico de una parte de la población, como obesidad y dolencias cardiovasculares", explica Bob Dietz, portavoz de la OMS en Pekín.

La política del hijo único

Cadenas de comida rápida y supermercados plagados de bollería industrial forman parte de la vida diaria de un país en el que muchos ciudadanos aún recuerdan la hambruna de finales de los años cincuenta y principios de los sesenta como consecuencia del Gran salto adelante, lanzado por Mao Zedong en 1958 para impulsar la producción industrial, y que costó la vida a unos treinta millones de personas. "Es necesario poner en marcha programas de educación pública, enseñar a los niños en la escuela qué deben y qué no deben tomar. No se trata sólo de que la gente coma en exceso, sino de que come mal. No sólo hay ricos gordos, también hay pobres gordos", afirma Dietz.

Los expertos no se ponen de acuerdo sobre la incidencia de la política del hijo único. El portavoz de la OMS descarta esa teoría, pero Cecilia Cheng, psicología de la Salud en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong, opina que la obesidad entre los llamados pequeños emperadores se debe a que "al tener un solo hijo, el trato de los padres es muy diferente". "La atención se centra en el hijo, lo protegen de más, por miedo a perderlo, y lo alimentan en exceso". En Pekín y Shanghai uno de cada cinco niños está obeso.

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