Funcionarios de los juzgados de El Prat reclaman más seguridad

La policía sigue buscando a los dos asesinos del agente

Medio centenar de funcionarios que trabajan en los juzgados de El Prat de Llobregat se concentraron ayer frente al edificio judicial, convocados por los sindicatos UGT, CC OO, CSIF y STAJ, para reclamar más seguridad en el interior de los edificios judiciales. El pasado lunes se fugaron de los juzgados de El Prat dos detenidos, a los que la policía sigue buscando, tras matar a tiros a un agente y herir a un albañil.

Representantes sindicales aseguraron que son numerosas las situaciones conflictivas que se producen en las dependencias de El Prat y que "la inseguridad es permanente".
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Medio centenar de funcionarios que trabajan en los juzgados de El Prat de Llobregat se concentraron ayer frente al edificio judicial, convocados por los sindicatos UGT, CC OO, CSIF y STAJ, para reclamar más seguridad en el interior de los edificios judiciales. El pasado lunes se fugaron de los juzgados de El Prat dos detenidos, a los que la policía sigue buscando, tras matar a tiros a un agente y herir a un albañil.

Representantes sindicales aseguraron que son numerosas las situaciones conflictivas que se producen en las dependencias de El Prat y que "la inseguridad es permanente".

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La concentración se llevó a cabo dos días después de que dos detenidos que acababan de prestar declaración y que iban sin esposar robaran la pistola a un agente, al que mataron con esta arma; hirieran a un albañil, y huyeran posteriormente por el garaje del edificio. Sindicatos y trabajadores consideran que los edificios judiciales deben estar vigilados por agentes de los cuerpos de seguridad del Estado. En la puerta del edificio judicial de El Prat presta servicio un guarda de seguridad que no va armado y está subcontratado a una empresa privada.

La treintena de trabajadores de los juzgados consideran que mantener un edificio judicial en el centro de la ciudad, tal como está ahora, es la respuesta más lógica a la política de justicia de proximidad y creen que es injustificable la construcción de unas nuevas dependencias en un barrio como Sant Cosme, con un alto grado de delincuencia y alejado del centro. Esta opinión entra en conflicto con los intereses de los vecinos del juzgado, que, tras el grave incidente del lunes, quieren que sea trasladado inmediatamente.

Fuentes policiales aseguraron ayer que se mantiene la operación destinada a localizar a los asesinos del policía.

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